No importa lo que suceda, siempre estaré junto a ti.
-Serie de OneShots sin relación alguna-
-Derechos a los respectivos artistas del artwork utilizado-
Sus pasos eran pesados y sonoros. Su respiración acelerada y profunda. El camino se volvía cada vez más y más interminable, y aún así, su corazón no estaba preparado para completar ese infierno traicionero. Sí, la chica a sus ojos era una completa traidora. La haría arrepentirse de haber siquiera roto ese lazo que habían forjado. Jamás podrías reparar el cristal roto.
—Muévete, tonta —Su garganta dolía. Su voz sonaba más ronca de lo que había planeado en un principio.
—Escúchame, Lancer y yo... —Susie se crispó más al oír tu voz. No, ya no debía confiar más en ti.
—¡Cállate y largo de aquí, niña! —Sus puños estaban fuertemente apretados. Se estaba tratando de contener.
—Mírame a los ojos, Susie —Esa orden le estaba mezclando sus sentimientos. Rabia y anhelo.
—¡Te voy asesinar! —Era el propio dolor de su alma que le estaba haciendo actuar como un verdadero monstruo.
No podía escuchar nada más. Susie estaba corriendo en tu dirección, y sin reparo, dejó caer su hacha sobre tu cuerpo, tus reflejos hicieron que lograses esquivar, sin embargo, el golpe que recibiste con el mango del hacha fue palpable casi al instante. Tus quejidos eran suficiente para hacer temblar a Susie, sin embargo, no flaqueo antes de golpear una y otra vez tu abdomen. No te estabas defendiendo. Tu expresión seguía reflejando fiereza determinada. No estabas arrepentida de nada, y eso era lo más frustrante. Susie elevó el hacha que sostenía con una sola mano. Si la dejaba caer terminaría con tu vida por completo, eras una humana después de todo. Ese era el verdadero camino a la liberación.
—¿Susie? —Escupiste. Tu abdomen dolía horrible, pero a pesar de todo, seguías viva.
—No quiero matarte, niña... —Susie se dejó caer de rodillas. Era notable el dolor en su expresión.
—¿Ven? —Irías personalmente, sin embargo, el dolor abdominal te permitía hablar y sufrir al mismo tiempo.
—Tonta... —Gateó hasta tu figura. Su gran mano ahora estaba acariciando tu mejilla.
—Fue por tu propio bien —Cerraste tus ojos. Respirar dolía, sin embargo, tu alma ya no cargaba ese peso.
Susie no sabía que hacer. Aparte de Kris, eras la segunda humana que consideraba alguien cercano, por lo que, en cierto sentido, olvido que los humanos tenían un cuerpo más frágil que los monstruos. Se dejó llevar por sus sentimientos y eso era algo de lo que se estaba arrepintiendo hasta cierto punto. Cubrió tu cuerpo entre sus brazos. Tus quejidos y expresiones llenas de dolor le hicieron sentir nerviosa. No quería hacerte daño, ya no. Se levantó, cargándote en el proceso.
—No vuelvas a traicionarme —Era débil. Simplemente no podía enfadarse contigo. Te adoraba.
—¿Qué pasa si vuelvo hacerlo? —Aún con ese toque de dolor físico, tenías una actitud tan altanera.
—Te romperé en más de mil pedazos —No. Jamás volvería a dañarte de esta manera. Antes moriría.
—Quiero verlo...
Susie era débil ante tus provocaciones, solo por ser tú. Es por eso que no le importó unir sus labios contra los tuyos, aún ignorando ese jadeo lleno de dolor y sorpresa, continuo en un ritmo de constante dominancia. Tener tu cuerpo estremeciéndose entre sus brazos, así como tu rostro el cual estaba plenamente ruborizado, solo alentaba más su torpe reacción. No iba volver a dejarte. Si le tocaba ser traicionada otra vez, se encargaría de al menos dejar una marca permanente en ti.
Su fidelidad pertenecía exclusivamente a tu nombre.
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Susie hace que se me olvide donde deje mi heterosexualidad, ni lo voy a negar 👉🏻👈🏻💜✨🛐
¡Bonita semana!💜✨
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