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ALESSIA

Estamos a día 20 ya, ¡qué emoción!, esta tarde me voy a Italia para desfilar con mi abuelo. Empieza el lunes la semana de la moda, hoy es sábado, pero así mañana hago todas las pruebas finales de vestuario y tal.

Estoy de verdad tan ilusionada...nunca había tenido tanta ilusion por algo en mi vida, y encima va todo tan bien...y voy a ver a Bruno después de todo este tiempo.

Ahora estaba haciendo las maletas y todo, terminando ya. El vuelo sale a la 1pm.
Tengo que decir que los chicos estaban un poco raros...pero sinceramente preferí no preguntar, a veces es mejor no saber.

Kiara había estado aquí conmigo ayudándome y tal.

Cuando terminé la maleta me vestí, con esto.

Ni me maquillé ni nada, y me dejé el pelo suelto

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Ni me maquillé ni nada, y me dejé el pelo suelto.

—Chicos yo estoy ya, cuando me digáis nos vamos —dije mientras iba al salón, donde estaban ellos. Se miraron. Jason vino hacia mí—

—Llevas todo, ¿segura?. Las cosas para curarte la cicatriz y todo —asentí. El suspiró y me abrazó— te voy a echar de menos, Alessia...—me cogió de la cara y me dio un beso—

—Bueno, yo creo que vais a estar contenetos de libraros de mi una semana, ni que me fuera para siempre —les sonreí—

—Ya..—dijo Jason—

—Te quireo mucho, Lessi, ya lo sabes —me abrazó Ryan también—

—Ay, sois unos dramáticos —dije medio riéndome— Adiós mi chiiicoooo —dije mientras acaricié a Danco— Cuida de ellos bien mientras yo no estoy eh, que no lien ninguna gorda —le abracé—

—Vámonos anda, así entre que llegamos y todo vamos con tiempo —dijo Jason—

Cogimos todas las cosas y nos fuimos.

Cuando llegamos allí estaba Sebastian esperando también y algunos de sus hombres que venían conmigo en el vuelo, es un avión privado, obviamente. Mis padres no me dijeron nada, ni un mensaje...aunque ya, no tengo muchas expectativas.

Nos bajamos los tres del coche. Había que andar un poco hacia la zona del avión.

—Alessia...—me dijo Jason cuando estábamos llegando ya casi al avión, con un tono extraño. Me giré para mirarle a la cara, miró a Ryan—espero que puedas perdonarnos, y entender que nosotros todo lo que hacemos es por ti, por tu bien, y que para nosotros tampoco es fácil...

—Qué...—no entendía nada, la verdad—

—Alessia no vas a volver, te quedas en Italia, ya está todo hablado

—¿Qué? ¿Por qué? —miré a Ryan pero miró al suelo— y por qué no me habéis preguntado a mi primero, por qué nadie me tiene en cuenta, joder, estoy harta. No me voy a quedar en ningún sitio porque no voy a hacer lo que os de la gana a vosotros, si tanto pensáis en mi, por qué no me tenéis un poco en cuenta...—me cabreó bastante, encima me cabreó más que esperaran hasta el último momento para decírmelo—

Amor como una balaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora