Amor como una bala

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ALESSIA

Cuando entramos en casa solté al perro y me fui a duchar directamente. Después, Jason me ofreció cenar pero no tenía mucha hambre y a las 9pm me fui directa a la cama.

Me tumbé y respiré hondo. Yo soy muy fuerte, y de verdad que no me asusta nada, ni toda esta situación.
Pero ya ha llegado un punto que no puedo más, estoy harta de estar en peligro todo el rato por mis padres y que ni me llamen para ver qué tal estoy.

Me estoy arriesgando la vida por ellos y sus mierdas de movidas en las que yo nunca les pedí entrar y que ni las conocía hasta ahora y ni un mensaje...

Justo en ese momento me llamó alguien. Bruno...cuánto le echo de menos...no se si es el mejor momento porque probablemente llore pero obviamente se lo cogí.

—Brunooo, ¿qué tal?

—Yo bien...Me he enterado de lo que os ha pasado, ¿cómo estás? —¿lo sabe...? No me puedo creer que Bruno lo sepa y me lo haya ocultado—

—¿De qué te has enterado...?

—De que esta mañana habéis tenido un accidente con el coche, que se te fue un poco porque estaba lloviendo, ¿no?

—Si, pero nada grave ya estamos bien. ¿Te lo han dicho papá y mamá?

—No...me ha llamado Rose —claro, obviamente no iban a ser mis padres...no se qué me esperaba— mañana o el finde voy a verte, te echo mucho de menos, además con esto me has dejado un poco preocupado..

—No —no puede venir ahora, si no sabe nada...mejor que esté así, que no le metan a él también en esto— no puedes venir ahora, Bruno

—¿Por qué...? Alessia, ¿pasa algo?

—¿No sabes nada...?

—¿Nada de qué? ¿Qué pasa? Me estás preocupando mucho, mañana voy a verte

—Que no, no puedes venir. Ni a casa de papa y mama, ni a ver a Daryl, quédate allí por favor —me estaba doliendo mucho decirle eso a mi hermano porque yo tengo muchas ganas de verle—

—¿Me puedes contar qué está pasando? Nunca nos hemos escondido nada...

—No puedo contártelo ahora...lo siento, de verdad que te lo voy a explicar todo, te lo juro, Bruno, te lo juro. Pero ahora no es un buen momento, cuando se tranquilicen un poco las cosas te llamo, voy a verte o lo que sea, pero ahora no.

—Me estás acojonando muchísimo

—Noo, no te preocupes, estoy bien y todo va a ir bien pero...ya te contaré. Tú no te preocupes por mi, sigue allí con tu trabajo y todo por favor. ¿Te dijo el abuelo lo del desfile...?

—Si. No voy a modelar pero voy a ir, me dijo que tú si, estoy muy contento por ti —sonreí—

—Vale pues...si no te llamo en este tiempo nos vemos ya allí

—Eso es en diciembre...

—Si, pero no queda nada en realidad. No te preocupes, yo te mandaré mensajes y todo. Pero necesito que me jures una cosa —cuando juramos lo cumplimos, siempre—

—Claro...

—Jurame que no vas a venir a verme, ni a Manhattan Beach, ni me vas a llamar ni a mi ni a mama ni a papa. Solo contestar a mis mensajes.

—Eso es mucho...

—Por favor, Bruno

—Vale, te lo juro

—E intenta que no te relacionen con nosotros, si notas algo raro, a alguien raro, que te siguen o te piden datos de algo sospechoso me avisas. Ahí si que puedes llamarme