Amor como una bala

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ALESSIA

Qué raro todo.

Ayer Jason estuvo otra vez simpático conmigo, que no me quejo, pero me cuesta creérmelo, no se si en dos días va a volver a estar tonto, pero bueno no me quejo.
Me ha hecho hoy el desayuno, bueno, un zumo, pero algo es algo. De verdad que estoy flipando.

Y el beso...en fin, sin comentarios. Me pilló desprevenida, pero bueno, tampoco iba a apartarme la verdad, pero fue un cabrón porque cortó todo el rollo cuando se estaba poniendo interesante, y no es porque no quisiera porque estaba cachondísimo, lo confirmo porque se le notaba un montón en la polla, pero esta se la guardo.
Aunque tampoco es que me guste y quisiera besarle, sí, está bueno, pero si tengo que elegir me quedo con Ryan que está igual de bueno y encima es cariñoso y buen chico.

Cuando llegamos a la universidad, como siempre tiré hacia otro lado, pero me agarró de la muñeca.

—Vamos —no dijo nada más, me le quedé mirando y sonreí un poco por el esfuerzo que está haciendo— no me mires con esa cara de tonta, venga —noté que él también sonrió pero intentó ocultarlo—

—Por qué estás tan majo conmigo de repente —me paré para que se parara él también—

—¿Prefieres que vuelva a ser un gilipollas?

—No

—Pues venga

—¿Entonces me vas a dar una oportunidad para demostrarte que no soy como te piensas?

—Sí, así que no la cagues

—Vale, trato —le extendí la mano, él rodó los ojos y se rió y me la dio—

—Vamos a esperar a los chavales anda —fuimos andando hacia donde quedan ellos por la mañana siempre y todavía no estaban—

Fue un poco incómodo porque no hablábamos, no sabíamos de qué hablar. Le miré y me reí porque se le notaba incómodo.

—¿De qué te ries? —no estaba borde como otras veces, estaba medio vacilón—

—Nada —seguía sonriéndole—

—Pues para de mirarme así —me puso la mano en la cara, yo se la quité—

—Se te nota incómodo

—No estoy incómodo —sonrió—

—Si, se nota mucho

—Cállate ya —volvió a hacerme lo de la cara—

—Para de hacerme eso

—O qué —volvió a hacerlo, intenté cogerle yo de las manos para que parara pero al final terminó él cogiéndome las manos y quedé pegada a la pared. Y eso si fue incómodo, estábamos muy muy cerca y...era un poco extraño. Nos separamos— tenemos que mejorar las clases de defensa

—Ahora que has decidido ser simpático conmigo seguro que cunden más —llegó Ryan, menos mal porque no se si podríamos seguir con esa conversación mucho más— holaaaa —estiré los brazos para abrazarle, qué bien huele...— ¿qué tal?

—Bien ¿y tú? Por lo que veo estáis mejor

—Sí, no sé cuánto tiempo más voy a poder aguantarla, pero sí —se chocaron las manos, yo rodé los ojos—

Seguimos hablando hasta que llegaron Kiara y Mason, todo genial, Kiara estaba super contenta con Jason por ser así de majo.

Luego tiramos para clase, no vamos todos a la misma pero están en el mismo pasillo, cerca.

Estábamos yendo hacia ls escaleras y me acerqué a Ryan.

—Ryan...

—Dime —me sonrió, es que es tan guapo...—