CAPITULO VI

3.6K 300 1
                                    

Naerya había estado buscando a su madre y cuando la encontró, en uno de los pasillos, la interceptó.

—Madre, quiero que dejes que me enseñen a cabalgar. —

—¿Y por qué querrías aprender algo así? —

—En días es el onomástico de mi hermano, decidieron ir a cazar al bosque, yo no pretendo estar hablando con las estúpidas ladys de siempre y tú tampoco querras que este ahí, no quiero pasar tiempo con los idiotas de mis hermanos y estoy segura tú tampoco quieres que pase tiempo con ellos, así que al menos déjame que cabalgue por las zonas. —

—¿Te niegas a tus clases de bordado desde que llegaste pero ahora quieres tener clases para subirte a un caballo? —

—No necesito clases de bordados, si hubieras preguntado o me hubieras ido a ver sabrías que mis bordados son excelentes, aún mejores que los tuyos, y como tampoco lo sabrás soy también muy buena en la costura y confección, antes de que me echaran de Casterly Rock yo misma confeccionaba los vestidos de lady Johanna porque me tenían de más que solo una copera. —a cada palabra se enojaba más.

—Sir Cole, enseñele a mi hija cuando esté libre a cabalgar. —suspiró.— ¿Contenta? —no tenía ganas de lidiar con su hija ese día y más si para variar quería hacer algo que no involucrara revolcarse con alguien.

—Sí. —confesó sonriendo, al fin había podido conseguir algo de su madre.

Estaba feliz volviendo a sus aposentos cuando se encontró con Aemond, decidió ignorarlo aún si él la llamó varías veces, lo que no espero es que la tomara del brazo deteniendola, el frenar de golpe le hizo doler el tobillo que apenas se había mejorado.

—¿Pretendes ignorarme ahora? —

—Sí, sueltame ahora mismo. —sabía que no tenía sentido hacer fuerza, no conseguiría nada.

—¿En serio te enojaras por eso? —

—Estoy ocupada y de lo que menos ganas tengo de hacer es perder el tiempo contigo. —claro que estaba enojada por eso pero no le daría explicaciones de nada.

—¿Ocupada haciendo qué? —

—Eso no es asunto tuyo. —aún así sintió el brazo de Daeron en sus hombros y vió como apartó a su hermano de ella.

—Esta ocupada porque va a salir conmigo. —

Ese enano del mal sabía como aprovechar cada oportunidad.

—Ella no estaría...—

—Ibamos a ir a volar con Darkfyre y Tessarion. —afirmó y quito el brazo de su hermano de su hombro.— Pero venía a decirte que no podrá ser, ayer me doble el tobillo y aún me duele, así que volveré a mis aposentos. Si quieren pueden seguir matándose entre ustedes, realmente no me interesa. —añadió antes de apartarse de ellos.

No le molestaría que Aemond sufriera un poco pero aún así no le daría el gusto a Daeron de usarla para sus fines (que aún no comprendía cuáles eran).

—Yo voy a acompañarte. —ambos dijeron a la vez.

—No necesito ni quiero la compañía de ninguno de ustedes dos. —aclaró aunque ninguno parecía importarle lo que ella opinaba porque peleaban entre ellos sobre quién debería ir.

—Son insoportables. —y comenzó a caminar, por supuesto ambos se volvieron a poner en su camino.— Apartense ahora de mi camino. —ya estaba enojada.

—Elige con quién irás. —Aemond ordenó.

—Ninguno de ustedes dos me dirá que tengo que hacer, pueden ser más altos que yo ahora pero si me siguen molestando no voy a dudar de dejarlos a los dos en el piso rogando que aún puedan tener hijos. —básicamente les gritó.

Amor o DeseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora