Sofia no pasó buena noche, sentía que su cuerpo le dolía y se quejaba dormida. Al despertar quiso levantarse de su cama, pero estaba muy débil.
-No te levantes Sofia-le dijo con cariño Laura-tienes fiebre-tocó su frente-Voy a ir a llamar a un doctor.
-Fernando-dijo con dificultad-es doctor de niños, llámalo a él por favor-dijo queriendo llorar.
-No se puede Sofia, él no puede verte-dijo con pesar.
-Por favor, por favor-suplicaba llorando.
Laura salió del cuarto fue a buscar al director para informarle lo que había pasado, pero no estaba, fue a buscar a Carlos y él se preocupó. Los demás niños aún dormían, pero pronto tendrían que levantarlos. Buscaron el número de varios pediatras, pero ninguno podía ir al orfanato.
-Carlos, Sofia me pidió que llamara a Fernando, me dijo que el era pediatra, el directo no está, ¿y si lo llamamos?
-No tenemos su número de celular y nos podemos meter en un problema muy fuerte.
-Debe de estar en la oficina del director, yo voy a buscarlo.
-Espera-la detuvo del brazo-voy a llamar primero al director y saber si va a venir.
Carlos hizo la llamada. El director le dijo que estaba muy ocupado y que no iría al orfanato ese día, que ellos se encargarán de todo.
-Luciano no vendrá hasta mañana, que nos en carguemos nosotros.
-Perfecto, voy a su oficina.
Laura busco el número y por suerte lo encontró. Marco.
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Fernando estaba dormido cuando su celular sonó, el ruido lo asustó un poco pues eran las 6 de la mañana.
-Bueno-dijo adormilado-si soy yo, ¿quién habla?-se levantó de la cama al saber de dónde provenía la llamada y salió del cuarto-voy inmediatamente para allá, si tranquila.
Laura le dijo que fuera solo, pues más gente en el orfanato sería muy sospecho y sin permiso del juez no podían entrar, pero ellos harían un excepción. Fernando sin despertar a su familia se cambió de ropa, fue a su consultorio a tomar su maletín y se fue al orfanato. No tardó mucho en llegar, estaba preocupado por Sofia. Laura lo metió por la puerta dónde ellos entraban.
-Gracias por llamarme-le dijo dirigiéndose al cuarto de las niñas.
-Tenemos un pequeño consultorio, voy a ir por Sofia, así nadie lo va a ver-le sonrío con pena.
-Está bien, gracias-entro al consultorio.
Laura tomó a Sofia en brazos, estaba dormida. Llegó con ella Fernando rápidamente se la quito de los brazos y la acostó en la camilla.
-Sofia-dijo con cariño-tiene fiebre-dijo tocándole la frente-princesa-le dio un beso en la frente.
-Papi-dijo ella muy débil sin abrir los ojo.
-Si mi amor, soy papá.
-Papi me duele la garganta-abrió poco a poco los ojos.
-Ya estoy aquí si-le sonrío-voy a revisarte y curarte-volvió a besar su frente.
Fernando saco una lamparita de su maletín y le abrió la boca, tenía la garganta muy roja.
-Tienes infección en la garganta mi amor-dijo con pesar.
-¿Va a estar bien? - hablo Laura por primera vez.
-Sí, con los antibióticos a sus horas si-dijo volteando a verla-¿me quiere decir cómo fue que le paso esto?
