En la vida siempre hay dilemas como diferenciar entre lo correcto e incorrecto, entre actuar con raciocinio o sentimentalismo, lo apropiado o lo inapropiado; sin embargo, nunca había tenido que debatirme antes porque era un hombre que siempre sabía...
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***************GISELLE****************
- Giselle, preciosa — dijo Andy suavemente para despertarme, me senté — debo irme — observé la hora, eran las 06:00 de la mañana — no quería que te levantarás y no me encontrarás, iré a casa para cambiarme e ir al trabajo — asentí — quédate aquí hoy, es lo mejor para ti, has tenido una noche difícil.
- Yo quiero ir al trabajo, estoy bien, no podré descansar hasta tener justicia para Margarett, ella se arriesgó, habló porque se lo pedimos, ¿recuerdas ese día que me quedé con ella mientras fuiste a comprar comida? El mismo día del cumpleaños de Danny — asintió — yo le dije que podríamos mantenerla a salvo si ella hablaba, dijo que confiaba en nuestro trabajo y no puedo dejar de sentirme responsable, así que necesito seguir trabajando.
- Solo haz una pausa por hoy, no es tu culpa — pidió, me tomó de las mejillas para darme un beso — quédate en casa, vendré a verte saliendo del trabajo, te amo, preciosa — me dio otro beso para irse finalmente.
Estuve 35 minutos dando vueltas en la cama intentando dormir nuevamente, pero no, me era imposible quedarme quieta sobre todo ahora, tomé una libreta y empecé a hacer un hilo de los hechos de ese día, empecé a buscar el motivo, medio y oportunidad sobre el asesinato de Margarett, el motivo y medio estaban más que claros, pero la oportunidad, ¿cómo sabía que esa noche podría matar a Margarett?, esa pregunta me llevaba hacia la supuesta monja que me dijo que esperara a Margarett en la iglesia, según palabras del propio Marcus, todas las monjas estaban rezando, eso quiere decir que esta mujer no era parte de ellas, que debió estar vigilando a Margarett, ella sabía que las monjas estarían ocupadas esa noche, si tan solo hubiera una forma de saber quién fue la última persona con quien se comunicó Margarett además de Marcus, quizás estaba recibiendo amenazas y no quiso decirnos para no preocuparnos. Solo había una forma, llamé a un antiguo amigo de la escuela, él estudió ingeniería de sistemas en la MIT, me debía un enorme favor, decidí cobrarlo, le pedí solamente los números telefónicos, nombre del titular de la línea telefónica y ubicación de las últimas llamadas entrantes al teléfono de Margarett durante las 24 horas previas a su asesinato, le prometí que no se metería en problemas, y que no diría su nombre, accedió. Quise adelantarme, tener una ventaja porque sabía que Diesel retrasaría esto de alguna forma, así como lo hizo con la orden de allanamiento de su club, a veces es bueno saltarse las reglas. Después de unos minutos, me remitió la información que le solicité, una llamada recibida a las 18:00 captó mi atención, la ubicación era en los alrededores del club de Diesel, rápidamente me di una ducha y me cambié para ir al trabajo, no sin antes tomar una cargada taza de café.
Mientras conducía al trabajo, llamaba insistentemente a Marcus porque además de querer compartir esta información con él, estaba preocupada por la forma en la que se fue, tenía su teléfono apagado, lo que provocó que mi preocupación por él aumentara, incluso la señora Prescott me preguntó por él cuando salí de mi apartamento, entré a la Fiscalía, era extraño llegar después del mediodía, salí del ascensor, las chicas se sorprendieron al verme, Andy estaba regresando a su oficina, al parecer todos estaban al tanto de lo qué pasó, iba a acercarme a ellas, pero Andy empezó a caminar hacia mí.
