T2 - Capítulo XC: Lo que se avecina

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*************GISELLE*************

- Señorita Quintanilla, adelante — me dijo la recepcionista para guiarme hasta el área privada de Nick en el bar del hotel, él se paró inmediatamente al verme.

- Sabía que volverías — dijo sonriente, saqué la foto de mi bolso, se la extendí, la miró — yo no mandé a tomar esta foto.

-  No te creo, así que dime qué es lo quieres, hagamos un trato, quiero seguir con mi trabajo.

-  Te quiero a ti, Giselle, pero no he sido yo quien tomó esas fotos, sin embargo puedo averiguarlo.

-  No es necesario, ya que si no eres tú, solo puede ser tu padrastro — ante él lucia calmada, pero era todo lo contrario por dentro.

-  Yo puedo encargarme de él — dijo sacándome de mis pensamientos — por ti, soy capaz de cualquier cosa, pero solo debes ser mía y prometo poner el mundo a tus pies — dijo acercándose a mí mientras me tomaba la barbilla, ok, es hora de irse, quité su mano.

-  Jamás estaría contigo, Nick y no necesito de ti para cuidarme, haré que tu padrastro termine en prisión y pague por sus crimines.

-  Mejor quédate quieta, odiaría que te pasara algo, mi preciosa Giselle — dijo pellizcando mi barbilla — ¿o solo Barber puede decirte así? — acortó más el espacio — bueno si quieres que te siga diciendo así, deberías alejarte, a Diesel le gusta dar donde más duele —  sonrió levemente — ¿si algo le pasa, te dolería mucho? — puso su mano sobre mi mejilla — ¿o a él le dolería si algo te pasa? — aspiró ligeramente mi aroma — solo pídemelo, y te juro que lo hago, deja a Barber y a cualquiera de esos imbéciles de Prescott y Miller.

-  ¿Por qué esperas tanto de mí si jamás te di motivo alguno? — pregunté intentando comprender qué había hecho para tener a un hombre así detrás de mí.

- Los hombres creemos falsamente que tenemos el poder sobre las mujeres cuando es todo lo contrario, ustedes lo tienen, tú lo tienes sobre mí, Giselle — tomó mi mano para colocarla sobre su pecho — pídeme lo que sea y lo haré por ti, ¿quieres que mate a Diesel? — demonios, cómo rayos me iba de aquí, quizás Andy puede tener un poco de razón, solo a veces puedo ser un poco impulsiva.

- ¿En serio lo harías por mí? — Giss, no juegues con fuego, sobre todo si un inestable tiene el encendedor, él asintió — ¿me pondrías por encima de un hombre quien es como tu padre? — volvió a asentir — no te creo, además él es parte de tu familia.

-  Solo se cogió a mi madre y me es útil, pero si tengo que moverlo del camino para llegar a mi reina, lo hago — dijo acercándose más a mí, me alejé.

- No, sabemos que no lo harás y jamás te pediría algo así, no soy ese tipo de persona y no quiero que esperes nada de mí.

-  Pero, ¿quieres que lo haga? — estaba tan tentada a decir que sí.

-  No — acomodé mi bolso en mi antebrazo — no necesito recurrir a esto, haré las cosas del modo correcto, del que me enseñó mi padre, ten cuidado con lo qué haces, y si tú o él tocan a Andy, ya no haré las cosas del modo correcto — advertí, él se sentó sin perder la sonrisa, salí del hotel para ir a mi apartamento, tenía llamadas perdidas de Andy, Marcus y las chicas del trabajo. Mierda, creo que acababa de perder mi trabajo.

CULPABLE (CON ANDY BARBER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora