26* Cry your heart out - Adele

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Un rato después, Helen miraba por el balcón de su habitación, la gente había llenado con risas y pláticas el patio que horas y días antes estaba muerto.

Arthur tocó a la puerta, abrió y Helen entendió que ya era hora, él bajó primero aquellas escaleras de caracol y la esperó al final de ellas. Helen tenía nervios y miedo, bajó un pie para tocar el primer escalón, pero lo regresó rápidamente, respiró, tomó el barandal y volvió a bajar el pie para tocar el peldaño, entonces llegó hasta abajo.

Arthur, sin ofrecerle la mano, la dirigió hasta la entrada de la sala y ahí estaban muchos desconocidos, sus padres, Lizzie, David, Daniel y meseros, que al verla, gritaron al unísono "¡Sorpresa!".

Helen, un tanto incómoda, fingió alegría cuando todos gritaron y se acercaron a ella a saludarla, abrazarla, besarla, todo la hacía sentir incomodidad. Rápidamente la separaron de Arthur, ella lo miró mientras la alejaban, él solo le sonrió. La gente la abrazaba, la llevaban a sus pequeños grupos de amigos para hablarle.

En un punto, se disculpó para ir al baño de esa planta (baja). Al terminar, comienza a sonar "Cry your heart out - Adele" y tal como lo dice la canción, se encuentra sola en el mar de gente en la casa (segunda 35), los ve a todos reír entre grupitos, beber, disfrutar la vida, algo que ella no hace.

Hasta que una mujer (segundo 39 de la canción) la toma del brazo y la lleva con más desconocidos que ríen por algo que dicen, que le tratan de decir cómo se conocieron, la quieren hacer recordar, se ponen tristes y le dicen:

- Personas: Ya verás, todo estará bien, lograrás recordar y serás la de antes.

Eso solo hizo sentir más incómoda a Helen, quien sonreía y escuchaba por educación, pero quería salir huyendo. Se disculpó con ellos con la excusa de ir a buscar a Arthur, lo mismo hizo con muchas personas que querían hablarle, Helen realmente empezó a buscar a Arthur, el único que con cierta certeza conocía.


Cuando lo encontró, él platicaba con otras personas, reía, sonreía, estaba muy feliz, por lo que Helen decidió dejarlo disfrutar. Tomó una copa, la bebió rápidamente y decidió subir sin que nadie la viera, porque estaba abrumada, entró a una habitación que no recordaba qué era, una pequeña sala, se sentó ahí, en la oscuridad total a tomar del resto de su copa.

Continúa escuchándose la canción, cerca del 01:50 min.

Sola en ese cuarto, sin nadie que la buscara, se dio cuenta de lo miserable que la fiesta la había hecho sentir, la frustración por no poder recordar quiénes eran todos abajo o el ni siquiera ser tan rápida para procesar tanta información y guardarla en su mente, se multiplicó.

Pero estando ahí, a solas, a oscuras, también experimentó alivio por no tener que hablar con nadie más.

Helen y Arthur. Las letras falsas de una canciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora