No lo podía creer...
Era la viva imagen de Thanor, no supe que hacer. ¿Me estaría volviendo loca? ¿O seria que ya me morí?
No, no era nada de eso. Ese era Thanor, vivito y coleando. Comenzó a caminar hacia donde estaba yo. Yo parecía que había visto un fantasma, aunque realmente creía que eso era lo que estaba viendo.
-Hola, tiempo sin verte- dijo Thanor como que fuera cosa de todos los días morir y aparecer así de la nada.
-...
- Siempre estoy para salvar tu pellejo. Cuando te dije que corrieras no era para que lo hicieras siempre- dijo con una sonrisa irónica- ¿Que hacen ustedes tres aqui?
-Me parece que la pregunta es ¿que haces tú aqui?
-Es una larga historia...
-No tengo prisa, de todos modos ya nos ibamos a ir a dormir.
-Esta bien, te cuento.-pasaron unos dos segundos que me parecieron como dos horas.
- ¿Y? Estoy esperando- la impaciencia de siempre.
-Veo que no has cambiado mucho- sus ojos eran lo único que me distraía, como si el fuera el unico licántropo en el mundo.- Bueno en resumen, cuando los humanos me atacaron los mate y...
-¡A todos!-no me lo creía.
-No me interrumpas- no quise interrumpirlo, solo que ¡doce contra uno!- Entonces como decía los maté, pero no a todos, dos quedaron vivos y me capturaron. No pude hacer nada. Tenia una pierna rota y me sangraban las orejas y la nariz. Ya no veía ni pensaba claro. Pero lo mejor era que me capturaran a mí porque tu ya estarías lejos y no te encontarían... Luego llegamos a una tribu nómada. Viajamos muy lejos. Ahí fue cuando me di cuenta por que se tomaron el trabajo de ir tan al noreste. Una humana me esperaba, pero no iba sola. Un pretendiente al lado de ella. Yo era un simple ofrenda...
-¿Pero luego como llegaste hasta aquí?- pregunté.
- Me ataron a una especíe de poste con caras de animales. Me torturaron por mucho tiempo. Cada día era peor que el anterior. Para comer me daban comida putrefacta. Enfermé. Me enteré de que el día de la boda me sacrificarían a los dioses, con el proposito de apaciguarlos. Todo encajaba. Boda prohibida.- me miro tiernamente- El día de la boda, me desataron, caí de cara en el piso. Junte toda la fuerza de voluntad que había dentro de mí y salí corriendo lo más rápido que pude hacia el bosque. Los humanos se quedaron desconsertados. En lo que ellos decidian que hacer, yo ya me había alejado. Busque un lugar seguro para esconderme. Cuando lo hice, esperé a que los humanos dejáran de buscarme. Estube dos días escondido en una cueva mugrienta, pero al menos estaba vivo y lo más importante, libre.
Hubo un largo silencio. Todo lo que él había echo... solo por protegerme. Era lo más tierno que alguien había hecho por mí jamás. pero tenía que concentrarme, no era tiempo de enamorarse, no con tantos problemas.
- ¿Que más paso? ¿Como nos encontraste?
- Luego de huir, cuando salí de mi escondite decidí volver. El unico problema eea que no tenía ni idea de donde estaba. Con el tiempo comenzé a recuperarme y mejorar. Luego tiempo despues los vi a ustedes y comenze a seguirlos...
-¡¿Que?! ¡Sabes lo preocupada que estaba! ¡Entonces esa sombra eras tu verdad! ¡¿Por que no aparecistes antes?!
- Calmaté...
-¡¿Como quieres que me calme?!
-¡Es que no sabía cual sería tu reaccion! ¡No quería asustarte! ¡Pero dadas las cirscunstancias, tuve que hacerlo!-Thanor exploto y hubo un incomodo silencio.
-Esta bien.-Aún seguia enojada pero Thanor tenía un punto- Pero no entiendo por que te tomaron a ti, si los demás ya estaban muentos.
- ¿No oíste lo que dijo antes?-era la primera vez que Greeb hablaba, Mezth solo miraba- Era un sacrificio, o sea lo necesitaban vivo. Como Thanor es enorme, debieron pensar que sus dioses estarían más complacidos si lo sacrificaban a el.
- Bueno, ha sido mucha charla por hoy. Necesito ordenar mis ideas, y creo que no soy la única. Mejor vayamonos a dormir.-yo ya no quería seguir con la conversación, además en verdad estaba cansada.
-Si. -dijo Mezth- yo haré la primera guardia, luego Greeb, Thanor y Leire. Eso si todos están de acuerdo.
-Claro.-respondimos los demás a la vez.
Como los pumas ya no estaban, dormimos en el refugio que habían dejado. Antes de dormir, Mezth reviso nuestras heridas y evito que me desangrara cubriénome con unas hojas la herida que tenía en la pierna. Con tanta emoción se me había olvidado por completo.
Cada cual se ubico donde quiso. Thanor no me quito el ojo de encima. Él seguía siendo mi protector de todas maneras.
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Corre
Hombres LoboLa ultima vez que lo vi, ni siquiera tuve tiempo de despedirme. Todo sucedio tan rapido. Nunca se borrara ese recuerdo de mi memoria. El me protegio y dio su vida por mi. Aun recuerdo lo ultimo que me dijo... Corre. ***************************** Est...