Corre

A muerto

Ya llevábamos tres días. Tres días dentro de la fortaleza Humana. Tres días sin dormir. Tres días de intensa lucha por nuestras vidas, por las vidas de nuestros hijos, y los hijos de sus hijos.

Acababamos de infiltrarnos en el castillo. El primer día fue el más agotador, murieron muchos a manos de los arqueros intentando abrirse paso por las puertas blindadas de la fortaleza.

El segundo día fue una ardua lucha... colmillos, espadas, garras, escudos, dientes. Era el sonido que se podía oír encima de todos los gritos de desesperación.

Ahora ya habíamos logrado colarnos dentro del castillo con Axel, Thano y Ferwaf. Rumbo a los aposentos del rey. Había que eliminar el problema desde la raíz.

Mientras subíamos las escaleras una sombra apareció de la nada. Se transformó en colmillos, luego comenzó a tomar forma, la forma del mal, la forma de Mugandir. ..

-Te extrañe loba negra...- me dijo con su horrible y grave voz.

-Desearía poder decir lo mismo de ti...-respondí.

-El hijo del rey... fue un buen lugar para regenerarme. Lastima que su cuerpo no era lo suficientemente fuerte para permanecer con vida hace unas pocas horas...

-Eres un bastardo.-grito Axel.-¡Leire corre! Nosotros tres evitaremos que te alcance. -Thanor me miró a los ojos y me beso.

-Sabes que hacer...- y su cara se transformó en una horrible mueca de dolor. Los tres habían empezado un combate mental con Mugandir. A muerte o nada.

Podía oír los gritos y quejidos de mis compañeros pero debía ir y matar al rey Evans. De una vez por todas.

Me sorprendí al ver el montón de soldados que resguardaban de su rey. Maldito cobarde. Pensé.

Deje que esa furia contenida se apoderarán de mi. No importa el entrenamiento, no importa.

Lo logre. Cuerpos yacían en el piso sin rastro de vida...

Abrí la puerta despacio.

Evans estaba en una esquina.

Espada en mano.

Miedo en el corazón.

-Eres tan imbécil- le dije al fin.

-A a a atrás. -tartamudeo.

-Esto es por mi familia...

Me abalance sobre el.

Me volví veloz como un rayo. Era totalmente imparable. Su espada no alcanzo ni a rozarme una sola vez.

Cuando lo tuve bajo mi control le dije:

-¿Sabes? Siempre supe que yo era mala. Pero ¿tu? Tu sólo eres un conejo asustado que mató a cientos por un capricho.

Undi mis dientes en su cuello. El rey había sido asesinado.

Tire el cadáver del rey por el balcón. Todo se calló. Nadie dijo nada. Los Humanos tiraron sus armas. Se habían rendido y nosotros habíamos vencido.

Gritos de victoria mataron al silencio de un solo alarido. Baje corriendo las escaleras del castillo.

Thanor y Ferwaf, arrodillados, frente a un cuerpo, el cuerpo de Axel.

-Mató a Mugandir. .. y murió en el intento. - Me desmorone en un mar de lágrimas.

Habíamos ganado.
A un pecio muy alto.