SANGRE ROJA

16 7 7
                                    

CENTRO DE DESARROLLO
DIEZ AÑOS ANTES

El guardia nos mira uno por uno para contar que no falte nadie. Nos hicieron sentar en el suelo de una de las salas. Todos los niños susurran a mi alrededor. Mis pequeños dedos juegan con la alfombra naranja que se encuentra debajo de mí mientras miro a mi amigo para tratar de calmarlo.
Luego de unos segundos una señora alta y vieja entra por la puerta, tiene un guardapolvo y muchos papeles en sus manos. Luego de mirarnos uno por uno cierra la puerta y se sienta en una silla, a ambos costados tiene a guardias protegiendo su espalda.

Se puso a leer sus papeles como si quisiera comprobar algo en ellos y seguidamente eligió a uno de nosotros al azar para hacerlo pasar al frente. Un chico con algunas pecas en su cara no se opuso a la orden y obligó a hacer sus piernas andar. Una vez que estuvo al lado de la mujer ella le pidió que extendiera su mano.

-Como saben- empezó a hablarnos- El color de su sangre no se determina hasta que cumplen la edad suficiente y por ello ahora todos tienen el mismo tipo. Así que quiero que la vean- ella le hizo un gesto con la mano al guardia para que le entregara una daga. El chico con pecas y cabello pelirrojo irradia miedo pero se obliga a no esconder su mano- Quiero que vean lo que corre por sus venas en estos momentos,por que ahora...para nosotros,todos ustedes son monstruos- con un movimiento rápido le hizo un tajo grande en la palma de la mano,el niño cerró los ojos y una lagrima rodo por su mejilla. La sangre roja empezó a brotar de ella- Esto es lo que son y esto es en lo que tienen que esforzarse en cambiar. Este color de sangre los condena a vivir en la miseria- miro la sangre goteando con asco- allá afuera son salvajes, valen menos que un pedazo de pan. No importa que tan fuertes o inteligentes sean,son basura. Gravence este día para siempre en sus memorias- hizo una pausa y elevó más la mano del chico para que todos la vean- Si tienen este tipo de sangre y amistades aca dentro, olvídense de ellas porque los van a empezar a ver por lo que son, basura.

Su sangre manchó la alfombra naranja a solo unos metros de mí. Me la quedé observando más de lo normal, mire como goteaba y como se perdía entre los pelos del piso. Esperé a que todo termine y me acerqué a la mancha que había dejado ésta. Mire a ambos lados para que nadie me viera y extendí mi mano hacia ella para tocarla con la yema de mis dedos.
Es espesa y sigue caliente.

La frote sobre ellos y al hacerlo no sentí nada.
¿Por qué no me hace odiarla? Los demás corrieron de ella como si fuera a matarlos. Pero yo sentí el deseo de verla más de cerca, de sentirla.

¿Qué es lo que está mal en mí?, ¿Por qué no le tengo miedo?, ¿Por qué siento que no es el monstruo que todo el mundo dice?




—————————————————————-
Gracias por leer❤️
-Delfi

Una Ciudad De Polvo y Huesos [1] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora