Negar un hecho es lo más fácil del mundo. Mucha gente lo hace, pero el hecho sigue siendo un hecho. - Isaac Asimov.
***
Kiara en un intento de ocultar lo evidente trató de desviar la atención.
—¿De verdad serías capaz de follarme aquí y ahora?
Enzo conocía las intenciones de la mujer. Sabía que aquello era única y exclusivamente para evitar responderle, aun así, dirigió su mano firme entre sus muslos, entrometiéndose entre la fina capa de ropa y palpando la vulva sobre la ropa interior.
—Puedo hacerlo, pero tenemos poco tiempo.
Ella lo invitó a seguir. Separó sus muslos y se enzarzó en un duelo de miradas. Miradas que hablaban por si solas. El policía rápidamente desabrochó su pantalón y con un ágil movimiento la hizo girar. Presionó suavemente en su espalda, obligándola a bajar el tronco superior… De esta manera, Kiara quedó completamente expuesta, con los senos pegados sobre el escritorio y el culo en pompa. El rubio no perdió tiempo, pues tampoco disponían de él, así que hizo la ropa interior a un lado y la penetró.
A ambos les excitaba la situación, a ambos les gustaba correr aquel riesgo de ser cazados tal y como habían experimentado en numerosas ocasiones. Las normas, las reglas no iban con ellos… La empresaria soltó un leve jadeo que a él le hizo suspirar.
—¡Joder!
Se aferró a las caderas e incrementó el ritmo, acercándose inevitablemente a aquel orgasmo que no podía retrasar. Hincó sus dedos en la rosada piel y gruñó cegado por el deseo. Kiara había ocultado estratégicamente aquellas marcas que quedaban visibles con una base de maquillaje, pero había zonas que simplemente no se había molestado en tapar y que en aquellos momentos quedaban expuestas al policía. Inevitablemente volvió a contabilizar lo que tenía ante sus ojos, prometiéndose así mismo que le devolvería cada uno de los golpes a aquel cerdo.
—Enzo, date prisa —solicitó entre tenues gemidos.
—Pienso follarte en la terraza de nuestra habitación —indicó clavándose en ella con rudeza —. No una, ni dos veces… y créeme que me importará una mierda quien nos vea. Pienso recuperar el tiempo perdido, te lo prometo.
Con aquellas palabras que no ocultaban nada se dejó llevar vaciándose inevitablemente en el interior de Kiara. Ella tembló por aquella sensación e intentó recobrar el aire pues, aunque no quisiera, aunque no debía, solamente fantaseaba con aquella lasciva promesa. Ambos rompieron la unión demasiado rápido para su gusto, pues si por ellos hubiera sido hubieran pasado interminables horas de sexo.
—No vuelvas a retarme —detalló orgulloso besando la cabellera de Kiara.
—Vamos Dios del trueno, si no lo hiciera… ¿dónde estaría la gracia?
Kiara colocó minuciosamente su ropa y se dirigió a la puerta del despacho, dispuesta a abrirla.
—Preciosa, si me aceptas un consejo, no compres está basura.
Ella agradeció aquel gesto y con una sonrisa impuesta abrió la puerta. Claudia enseguida oteo a la pareja, buscando una señal o una mueca que la hiciese intuir la distendida conversación que ambos podían haber llevado a cabo en el interior. Aunque realmente habían hablado poco…
—¿Las otras oficinas que me indicaste también están en la zona? — Claudia asintió, pues se había centrado en querer venderle lo más caro.
—¿Tiene alguna que no esté en el centro? En la periferia, pueblos aledaños… Es importante que en el lugar de trabajo se respire tranquilidad y sinceramente dudo mucho que en el centro de Madrid pueda darnos lo que necesitamos…
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Bailando con el amor | Erótica + 18 | Parte 3/4 Completa ✅
RomanceKiara se encuentra hundida y devastada cuando Enzo reaparece en su vida para, como diría ella, hacerse el héroe ante una situación insólita. Ella se niega a aceptar lo evidente por varios motivos: orgullo, desilusión y miedo, mucho miedo. Dorian har...