El retorno de Ronald (Trilogía mágica 2)

Epílogo

Al abrir los ojos se topó con una claridad demasiado fuerte, sus ojos se cerraron automáticamente de nuevo y volvieron a abrirse mas lentamente, intentando acostumbrarse a la luz brillante que parecía provenir de todas partes.

Se frotó ambos ojos con incomodidad y sintió que tenía el cuerpo adormecido y un tanto agarrotado.

Cuando sus ojos se acostumbraron por fin a la luz reconoció la habitación de hospital, las paredes ya le eran familiares ya que todas eran iguales.

Estaba en San Mungo.

Miró un poco mas a su alrededor y vio en la mesita de al lado, un jarrón con un ramo de margaritas y rosas rojas, algunos globos, dulces y unas cuantas revistas de moda y celebridad.

Agarró la revista de arriba porque algo había llamado su atención.

-¿Neville? - Exclamó sin poder creer lo que veía, tenía en sus manos un ejemplar de la revista "Corazón de bruja" y Neville Lomgbotton estaba en la portada con un titular que decía "¿Quien será capaz de conquistar este corazón de hielo" - Wow... ¿De que me perdí?

Hubieron dos cosas mas que llamaron su atención, dos titulares de hecho:

"Alice Thompson, de candidata a alcaldesa a difamadora y participe de un secuestro, enterese aquí de los detalles"

"Liver Donatt, el afamado exdirecto del profeta que le encanta hacer apuestas con la intimidad ajena y que participó en un secuestro"

-Por Merlín - exclamó un poco mas alto y eso despertó a la única persona que estaba allí con él y a quien no había visto.

-¿Ron? - Exclamó Gregory Goyle abriendo rápidamente los ojos y levantándose del sofá en el que estaba -Ron al fin despiertas.

Ron dejó la revista a un lado y recibió el abrazo que Goyle le dio cuando llegó a él, ambos se fundieron en un abrazo gratificante que duró varios minutos, luego le dio un beso ambos lo disfrutaron como nunca.

-¿Cuánto tiempo e estado aquí Goyle?

-Tres días.

-¡¿Que?! - Exclamó alarmado - ¿Tengo tres días sin cepillarme los dientes y acabas de darme un beso? No inventes Goyle.

El Slytherin se echó a reír quedamente sabiendo que su Gryffindor jamas perdería el humor ni siquiera después de haber estado en peligro.

-¿Gregory?

-¿Sí?

-¿Donde están?

No hacía falta que le dijera a quienes se refería, era obvio para el mayor de quienes estaba hablando.

-Ya regreso, les avisaré a todos que despertaste y los traeré para qie los conozcas... Lo cual me recuerda, que aún no les ponemos nombres.

Le dio otro casto beso en los labios y salió de la habitación.

A los pocos minutos, Goyle regresó cargando a sus dos preciosos bebés, detrás de él aparecieron Harry, Draco, Neville, Blaise, Charlie, Arthur, George y Ginny.

-Amor... Te presento a nuestros bebés... Varón y hembra.

Con cuidado, Goyle colocó a ambos bebés en el pecho de Ron, uno a cada lado.

Harry se acercó a él y le colocó una mano en el hombro.

-Casi me matas de un susto Ronald Wesley.

-A mí también - Secundó Neville - Bueno, a todos.

-Gracias a todos por estar aquí - les dijo Ron con lágrimas en los ojos.

-Hijo - Habló Arthur - como abuelo que oficialmente soy... Te pido que ya le pongas nombres a los bebés.

El pelirrojo miró a Goyle con ternura.

-¿Tú que dices?

Goyle se sentó justo a su lado y tomó de sus brazos a uno de los bebés, el varón en éste caso y miró su cabello negro y sus ojitos lindos, azules como los de Ron.

-Siempre me a gustado mucho el nombre Benjamín.

Ron por su parte miró a su hija, observando sus ojos negros y su cabello rojizo claro.

-Por mi parte siempre e querido una hija llamada Evelina.

-Oigan que lindos nombres - Habló Blaise - Benjamín y Evelina Goyle Wesley.

-Tomemos una foto de la hermosa familia - dijo George haciendo aparecer una cámara con su varita - sonrían.

Gregory se colocó un poco mas junto a Ron y ambos miraron a la cara mientras le tomaban la foto de la hermosa familia que habían creado.

UNA SEMANA DESPUÉS...

La salida de Ron del hospital San Mungo ya totalmente recuperado fue celebrado con una gran fiesta en la cabaña en la cual asistieron todos.

-Neville felicidades por aparecer una semana entera en la portada de la revista "Corazon de bruja" - le dijo Harry sonriendo - Vi que te tomaron unas fotos junto a Theodore Nott - alzó las cejas coquetamente para dejar claro a que se refería.

-Gracias Harry y bueno, solo eran unas fotos para la revista y ya... Voy a... rellenar mi refresco.

Y como siempre hacía, Neville salió huyendo, Ron se le acercó a Harry.

-Deja de presionarlo Harry.

-¿Que? Solo le dije un cumplido.

-Neville no es tonto, sabe lo que intentas hacer... No intentes emparentarlo con Theodore si no quiere.

-Ron... Su promesa ya está por terminar... y él se lo prometió a Dean...  Ya es hora de que lo cumpla.

-Lo sé... Pero para él no es fácil... Sabes que nunca estuvo de acuerdo en hacer esa promesa, solo lo hizo por presión.

-Hablando de otra cosa... ¿Hablaste con Blaise?

-Sí, pero aún no saben quien es el infiltrado del ministerio que puso en contacto a Alice y Liver con el traficante... Usó muchas apariencias con la poción multijugos para proteger su identidad, fue bastante listo o lista.

-Pronto lo sabremos, estoy seguro... ¿Y donde está Goyle?

-No lo sé, estaba aquí hace un...

-Ronald Wesley - alguien lo llamó a sus espaldas, la familiar voz de Gregory.

Al voltearse, casi se desmaya, Goyle estaba frente a él de rodillas, sosteniendo un precioso anillo de compromiso y detrás de él estaban Draco y Blaise sosteniendo una pancarta con muchos globos con la frase "CASATE CONMIGO"

Seamus Finnigan, quien tambien estaba presente, estaba junto a Ginny Wesley, ambos cargando a sus Gemelos, sonriendo y a la expectativa de todo.

-¿Que dices Ron?... ¿Me quieres hacer el gran honor de casarte conmigo y vivir a mi lado para toda la vida? - le preguntó Goyle mirándolo directamente.

-Claro que sí... Te amo.

Gregory se acercó y le colocó el anillo para luego besarlo mientras todos a su alrededor aplaudían y vitoreaban a la pareja recién comprometida.

-Te amo mi León - le indicó Gregory con ojos llenos de amor.

-Y yo a ti mi serpiente... Te amo en ésta vida y en todas las que sean necesarias.

Y sellaron esa promesa con un beso.

FIN.