56: Directo al peligro.

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1 HORA ANTES DE QUE RON DIERA A LUZ...

Goyle caminaba de un lado para otro con la desesperación enmarcada en su rostro, Draco había tratado de calmarlo de todas las formas que conocía pero era imposible, Gregory se debatía entre una furia ciega y unas enormes ganas de echarse a llorar.

Harry estaba hecho un mar de lágrimas y no se podía decir que Neville estuviera mejor.

Ron había desaparecido de la cabaña  sin dejar ningún rastro hace casi dos horas y nadie sabía nada de él.

Todos habían escuchado el sonido de una desaparición y corrieron a la cocina, pero al llegar no había nada extraño salvó una manzana que quedó dando vueltas en el suelo.

Los aurores se desplegaron por todo Grinmaud Place y en las afueras del mismo en busca de Ron, aun no se había notificado a su familia pero sabían que en cualquier momento se enterarían de la fea verdad.

Nadie entendía nada... ¿Como había salido sin que nadie lo viera, como desapareció y burló en campo de magia?... ¿Y por que?

No tenía ningún sentido.

La puerta de la cabaña se abrió y Blaise Zabini entró con pasos apresurados.

-¿Lo encontraron? - se apresuró a preguntar Harry con la voz quebrada.

Zabini no contestó pero negó lentamente con pesar y con la mirada seria.

Gregory se llevó ambas manos a la cara y Draco le puso ambas manos en los hombros, pero se soltó rápidamente y se fue hasta la cocina al borde del llanto.

Blaise lo siguió y antes de entrar en la cocina le hizo una señal discreta a Draco para que entrara también.

Neville intentaba consolar a Harry quien no paraba de llorar desconsoladamente asi que le fue fácil pasar desapercibido y entrar en la cocina.

Al entrar Goyle sujetaba en su mano derecha la manzana que antes había tenido Ron.

-¿Donde estás mi pelirrojo? - susurró con la voz quebrada - ¿Donde estás?

-Tengo una pista - anunció Blaise en voz baja - pero necesito la ayuda de los dos - dijo mirando alternativamente a Draco y Goyle.

-¿Sabes donde está? - Preguntó Draco poniendo ansioso ambas manos sobre la encimera.

-Sé donde comenzar para encontrarlo - respondió el moreno - Pero esto se tiene que hacer de forma discreta y sin fallos y con los aurores desplegándose en todo Grinmaud Place eso no será posible.

-Solo di que hay que hacer - Habló Goyle con desición recuperando la voz - Iré a donde sea y haré lo que haga falta para traerlo de vuelta a salvo con mis hijos.

-Eso es lo que quería escuchar - Respondió Blaise - Porque necesitaré tu fuerza, junto a la inteligencia de Draco y mi destreza para hacer esto.

-Como en los viejos tiempos caballeros - intervino Draco.

Los tres subieron al segundo piso y después al ático, Blaise saco una botella azul eléctrico de uno de sus bolsillos.

El retorno de Ronald (Trilogía mágica 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora