-¿Venti?
-Xiao~si viniste.
Para el adeptus era extraño ver al arconte nuevamente, no solo por lo sucedido antes sino tambien se sumaba la apariencia de este.
La altura de era unos cuantos centímetros más que su persona, quizás eran solo cinco o siete centímetros pero era notable para los que no le conocieran.
Su corto cabello peli azul con el degrade celeste ahora largo hasta casi llegar a la cintura del mismo.
Los rasgos del rostro de Barbatos no tenían mucho cambio, más que un lugar cerca de sus labios.-¿Eres tú? Pero ¿Qué sucedió? ¿Es por culpa de lo sucedido en Espinadragon?
-¿Qué? No, no es eso Xiao. Calma, déjame explicarte.
Aunque hubo una intención por parte de bardo de acercarse al adeptus, este dio un par de pasos atrás, en la cabeza de Venti solo asociaba esto con su repentina apariencia un poco mas afeminada que lo normal. Con un poco de prisa explico sus motivos de tal apariencia y su visita a Liyue, en sí, era por un trabajo.
Incluso si tenía toda la atención del guardián Yaksha, notaba lo distante físicamente de este y una pequeña alteración en el karma del mismo. Asumiendo que Morax habia hablado y explicado que lo ocurrido con la corrosión no tenía nada que ver con el karma de Xiao, este quizás no lo creía del todo, después de todo ¿acaso los padres no mienten?
-Xiao, yo no muerdo ¿sabes? Acércate un poco.
-No… eh, yo estoy bien asi.
El tiempo ofrecido por el joven Ragnvindr se estaba acabando y aunque solo quería mostrar un poco de afecto para aliviar al joven, este estaba renuente a tal suceso incluso alejo de una manotazo la mano de Barbatos que se acercaba a su rostro.
-Y-Yo, lo siento, no qui-quise hacerlo, yo…
-Ey, Xiao esta bien, no me rompiste nada… aunque si tienes tu fuerza. Esta bien, no insistiré, pero…
De su cabello se quito la flor de cecilia que llevaba, dejándola en el suelo cerca del adeptus.
-Un regalo para ti, es mi flor favorita y quiero que la tengas.
Xiao retrocedió con miedo de pisar la flor, de hecho negó ante tal preciado objeto para el arconte aunque este dejo claro que se sentiría dolido que no llevara esta con él. Asi que apenas retrocedió Barbatos, el Yaksha tomo la flor con muchísimo cuidado, casi como si fuera del cristal más frágil.
-Debo irme, pero regresare en uno días por aquí y en ese momento podremos hablar más tranquilos, donde tu desees. Por favor, come el tofu y procura descansar ¿sí?
Recibiendo solo un asentimiento con la cabeza, Venti se fue despidiéndose antes de Xiao.
-… es bonita.
Tanto el blanco de los pétalos asi como las hojas verdes rebosaban de energía elemental pura, no era tan fuerte pero era lo suficiente para mantener tan vivaz a la flor ¿Por qué le daría algo tan valioso? Aunque su forma era diferente, se parecían a las flores Chingtse que Ganyu a veces comia o que usaba Morax para medicamentos. Sin tener otro lugar donde guardar la flor, la coloco en el pequeño cesto que llevaba de su lado izquierdo, para luego tomar el plato de tofu y acomodarse para ingerir el mismo.
Si, Barbatos no era el dios convencional que los mortales esperaban, quizás en algún punto solo los que era nativos de Mondstadt pero estos tambien tenían cierto pensamiento de que arconte anemo los protegía desde un lugar en el cielo, sea donde sea.
Al principio para Xiao era difícil manejarse tanto con el arconte anemo pero debido a la amistad con Morax y la ayuda que le brindo siglos atrás, era con quien más podría abrirse en palabras… bueno, ahora no lo era, nunca imaginaria que el rubio viajero se convertiría en alguien tan especial.
-Aether…
Extrañaba al joven aventurero, extrañaba verle o escucharle, observarle desde la distancia mientras este cumplía los encargos del gremio de aventureros o de alguna persona que no conocía solo para ayudarle, incluso si eso implicaba terminar con herida o laceraciones superficiales que con preocupación ayudaba a limpiar la guía flotante.
¿Pero porque hacia eso? El dinero, no era mucho lo que ganaba como aventurero y la mayoría de alimento lo podía obtener de la naturaleza, pero tampoco entendía muchas de esas cuestiones mortales. Xiao solo quería al menos estar un poco mas junto al rubio para asi ayudarle en lo posible que estuviera en Liyue, pero ahora en Inazuma era imposible, si Venti regreso tan mal ¿Qué le esperaba a él? En su interior, desea que este regrese sano y a salvo, verle al menos en el rito de linterna y ser más abierto en su forma de ser.
• • •
-Tienes una cara muy preocupada.
-Espero que Xiao esté bien, me preocupa.
-Me dijiste que lo verías al regresar, no estaremos más que dos, máximo tres días aquí, asi que no comas ansias.
Venti simplemente camino junto pelirrojo, la calle resaltaba con todo ese rojo y las linternas en lo alto, aunque fue a pedido del arconte, estaba muy distraído.
-Mañana temprano tendrás la reunión ¿realmente no tienes ganas de hacer o visitar a algún amigo?
-No…bueno, tengo ganas de mojar mi garganta pero aquí lo único que tienen aparte de té de osmantus…es el vino de osmantus… asi que, creo que será vino.
-Espero no sea una forma de engañar a la cantina el Ángel Caído.
Con la mejor cara de ofendido, observo al pelirrojo.
-Eso es una ofensa, no hay mejor vino que del viñedo el amanecer, pero no trajo una botellita para mi, solo trajo para esa dichosa fiesta.
-Si te doy una, pedirás otra tras otra, no sé como haces para convencerme pero al final terminaría dándote todas.
-Es que mis ojitos son muy bonitos.
Antes de pegarle un gato en la cara, Diluc no tuvo más opción que llevarse al más bajo a restaurante que este mismo arconte eligió: Quiosco Xinyue.
Aunque con solo ver el lugar, el heredero de la casa Ragnvindr imagino que le cobraría hasta por respirar, por esos días estaba bien darse esos gustos y menos si era algo que en un futuro lo colocaría como una deuda a los caballeros de Favonius.
-¿De verdad puedo pedir algo de esta cartilla?
Venti no era tonto, conocía bien el valor del dinero y temía que al final, para devolver todo, debería trabajar en la taberna con un traje de maid o algo peor, aun en el fondo tenía un poquito de su orgullo.
-Claro, eres un diplomático de Mondstadt, le pasare luego la deuda a Jean y de ser posible se lo descuente a Kaeya de su pago.
-Bueno, si el maestro Diluc lo dice, le tomare la palabra.
-Eres un sinvergüenza.
-Ehe~
Aunque no pidió mucho en cena más que camarones de cristal, lo que bebió fue más que nada un par de botellas y un postre que tuviera manzanas, fiel a la manzana hasta la muerte. Tanto el pelirrojo como el peli azul de la cena, como de alguna remembranza sin sentido del temporal diplomático y con un lugar casi para ellos solos, fue más relajado el tiempo que estuvieron en el restaurante.
-No sé si es mi forma actual, el viaje en carruaje que me fue un poco tedioso el vino, pero me dio sueño.
-Descarto por completo al vino como causante de tu sueño.
Aferrado al brazo del pelinegro, Barbatos dejo salir un pequeña risa, tal vez aun no estaba al 100% para andar bebiendo o hacer cosas que requieran más de lo que puede dar, su estado era casi el de un mortal. De esa forma, ambos caminaron de regreso hacia el lugar donde se hospedaban.
-¿Venti?

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"Susurros del Viento"
FanfictionUna vieja amistad, naciones de por medio y secretos de corazones heridos por el tiempo. Pareja principal: Zhongli x Venti Otras parejas: Xiao x Aether Actualización: Viernes y Sábados. Personajes pertenecientes a Hoyoverse