C:18

1.1K 188 34
                                        


Pov´s Venti

-¿Estás seguro que puedes ir asi? Te veo más agotado que cuando subiste al barco.

-Kazuha, te agradezco pero no te preocupes, creo que estar tanto tiempo en Inazuma me ha pasado factura, ya sabes, el cansancio y agotamiento se siente más cuando estas cerca de casa.

-Aun asi falta para que llegues a Mondstadt, me hubiera gustado que el Alcor pasara por el puerto de la nación del viento, pero la capitana tiene un tiempo límite para la entrega.

-Por favor, no te preocupes por ello, la verdad estoy agradecido que me permitirían navegar junto a ustedes, fue divertido.

-Esta bien, en ese caso deseo que tengas un buen y seguro viaje de regreso, para que en una próxima aventura podamos brindar con una buena copa de vino.

-Oh mi nuevo amigo, que asi sea, te aseguro una buena botella de vino para  nuestra futura reunión, que el viento te guie y proteja, Kazuha.

Con toda la endereza que aun poseía, me aleje del puerto tras despedirme de mi amigo samurái, agradezco que estuviera tan concurrido todo, reparando y recogiendo cosas. Kazuha me comento que antes de ir a Inazuma, al parecer hubo un combate con la esposa de Osial, la flota Medirian prestó sus servicios, tambien hablo del viajero, tal parece lo conoció en un pequeño evento de combate  que la misma flota organizo, quizás como una ayuda de Beidou para calmar el pobre corazón de Kazuha y su amor perdido, del cual ahora solo quedaba esa visión electro apagada.

El egoísmo de Baal ha cobrado demasiadas vidas, hijos, esposos y amores que no regresaran… los mortales no perdonaran nada de ello durante siglos.

-Maldición… duele…

Las almas angustiadas, la corrosión palpable en la nación, las emociones negativas y mi limitación para pasar por desapercibido en Inazuma, solo causaron estragos en mi cuerpo elemental. Pero, todo ello no es algo que pueda dejar salir incluso aquí, necesito llegar mas rápido a Mondstadt.

-Si Morax me llega a ver, me mata.

Sin más opción, me aleje lo más que pude del puerto, aunque tuve que esconderme lo mejor que podía, con mi ropa llamo demasiado la atención, delataba demasiado mi persona… pero me gusta tanto este color. A unos cuatrocientos o quinientos metros de la entrada de la ciudad, por fin llegue a la colina, desde la cual a lo lejos podía divisar espinadragon. A esta altura y con el viento, la forma más rápida de llegar era con mi primera forma, como un espíritu, lo pro, llegar más rápido a Mondstadt, los contra, debilitarme y sufrir una recuperación dolorosa sin entrar en letargo… pero animo Venti, un par de cientos de botellas de vino me ayudaran… eso espero.

Sin más, con toda la fuerza que aun me queda, me convertí en un pequeño espíritu nuevamente y deje que la brisa me llevara nuevamente.

• • •


-¿Venti? ¡¿Venti es usted?!

-¿Mmh?

Un gran bostezo salió de mis labios… ¿bostezo? Santa maravilla, me dormí, Venti despistado. Estaba siendo sostenido por un par de manos, que al ver mi despertar dejo de  sacudirme, este aroma es de…

-Xiao, Xiao.

Maldita voz, porque se vuelve tan aguda y suave estando de esta forma.

-Se-, Venti, por fin despierta, estaba preocupado de que tardara tanto en regresar.

-Lo siento, Xiao, mi viaje tuvo varios tropiezos y limitaciones, pero ¿Cómo me encontraste?

-Llegaba de mi recorrido en el pantano, cuando llegue a la posada y escuche un extraño ruido en las ramas del árbol, subí para investigar y… bueno, lo encontré dormido en un nido abandonado. La verdad al principio pensé que estaba alucinando, pero al ver la flor entendí que era usted, aunque no entiendo como llego ahí.

-Mm… Bueno, mi plan era llegar a Mondstadt, pero parece que no me salió bien. Al menos me encontraste tu y no un águila… gracias, te debo mucho… por cierto ¿Le dijiste a Morax que fui a Inazuma?

-No, la verdad no pude y eso me ha tenido muy agobiado, mentirle u ocultarle lo que sabía, me es tan dif-

-¿Xiao?

Que me parta un rayo, esa voz es la del viejo zopenco. Como si fuera un muñeco, Xiao me agarro y oculto en su espalda, como cuando un niño esconde algo a sus padres. Me quede de piedra, creo que si aprieta un poco mas puede sacarme un ojo.

-¿Se-Señor Zhongli? Es raro verle aquí e-en la semana.

-Lo siento, no quería sorprenderte asi pero necesitaba verte.

-Por favor, no se disculpe, puede decirme lo que necesita.

-Quería saber si vistes a Barbatos pasar por aquí con destino a Mondstadt.

O no, no, no, no. Las manos de Xiao están sudando, le cuesta tanto mentir.

-¿Barbatos? No, yo…yo llegue hace poco, asi que no vi nada. Pero ¿acaso lo visito y olvido algo? Y-Yo puedo esperar y entregárselo.

-No, de hecho no estoy seguro que sea él. En el puerto escuche de alguien vestido de forma curiosa, pensé en el viajero en un principio pero muchos están familiarizados con él, pero cuando dijeron que usaba una boina y vestía de color verde, solo me llego a la cabeza Barbatos.

Tampoco soy el único en usar verde ¿no? Ni tampoco boina, viejo tonto.

-Oh… bueno, aun no le vi.

-Tal vez ya llego, porque no le vi en el camino, aunque es dudoso.

Por favor, que se vaya rápido que me exprimen el poco aire que me queda.

-Por cierto, Xiao, que tienes en la espalda.

Oh no, ahora somos dos sin aire.

-¿Q-Que?

-Tu espalda, por la posición de tus brazos debes tener algo ¿Acaso Aether te dejo un presente antes de irse?

-NO… lo siento, no, no eso… yo… e-eh.

Escuche sus pasos, ni una capa para pode esconderme bien tenia Xiao, al llegar se quedo aquí, quieto, de mi parte me quede inmóvil, sin pestañear.

-¿Qué es eso Xiao?

-Es…Es un muñeco que encontré, en el pantano Dihua. Al terminar de combatir lo encontré entre cajas abandonadas… se-seguramente algún mortal lo perdió y lo traje para que Goldet Veer lo guarde, por si regresan a buscarlo.

-Sí, es probable que una niña lo extrañe, fue buena idea recogerlo.

Qué buena historia Xiao, me salvas el pellejo. QUE LA PUT-

-Qué curioso, tiene una flor… como era el nombre ¿Cecina o Casia?... oh Cecilia, si, es el nombre de la flor en Mondstadt, la que ese bardo siempre lleva en el cabello.

Me saco de las manos de Xiao, aunque este estaba dudoso en soltarme pero lo hizo. Me miro curioso, revisando todo con detalle, como si realmente hubiera mucho que ver.

-Xiao ¿estás seguro que es un muñeco?

-¿Po-Porque no lo seria?

-Percibo restos elementales… es algo confuso, electro…anemo… no puedo distinguirlo bien.

-Tal vez… algún slime le paso por encima o lo tuvo.

-Es una posibilidad, pero lo mejor es eliminarlo, sabes bien que un mortal común no puede manejar algo asi, solamente los que posean visión o el viajero lo pueden conservar.

"Susurros del Viento"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora