Extra 2: Los plenos 27 (Parte I)

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Extra por las 5K Lecturas.

 Les agradezco el apoyo. En serio, no se imaginan lo contenta que estoy al ver que adoran a Emma, Milán y Natalia, tanto como yo.



Emma.



~04/02/2024~



Observo a Natalia jugar con Manchitas, mientras que el gato trata de huir.

Básicamente, el felino tiene un gorrito de tela y un vestido, que hasta ahora no logro entender como se lo puso. Además, está obligado a quedarse frente a la mesita en donde de vez en cuando la niña le pone croquetas para que él regrese por voluntad propia.

A mi parecer eso es manipulación gatuna.

Continúo planchando mi cabello para que quede lo mejor posible y que se vea bien. También observo el enterizo beige que llevo puesto y que, por alguna razón, me aprieta del trasero.

Hace dos semanas me lo probé y no me quedaba tan ajustado, así que la única respuesta que encuentro es que el gimnasio, sin duda, sigue causando cambios en mi cuerpo.

—Natalia. Ve, guardan tus juguetes, amor —ella me mira y hace un puchero —. Debemos salir cariño. Hoy festejaremos el cumpleaños de mamá y tu tío Lukas dijo que vendría por ti para llevarte primero.

—Pero estoy jugando —se queja y regresa a Manchitas a donde estaba.

—Entonces ¿No quieres pastel hoy? —sus ojos brillan y empieza a guardar todo en la cesta que tiene al lado.

Así como ella, yo también organizo mi maquillaje y lo que use, para enseguida ir a buscar mis tacones.

—Ya mami —la veo llegar al armario con su vestido pulcro y sus zapatitos del mismo color —. ¿Papi no viene?

—Papá debía dejar unas cosas listas en su trabajo para estar tranquilo toda la noche —ella asiente —. ¿No quieres tu leche de fresa aún? —ella niega con una sonrisa y la primera persona que llega a mi mente al ver ese gesto, es Maya —. Bien, entonces la llevaremos para que la bebas allá.

—¿¡Donde está la sobrina más linda del mundo!? —cuando las dos escuchamos esa voz, Natalia es la primera en correr a los brazos de Lukas que la espera en la puerta.

—¡Aquí está! ¡Soy yo! —él la levanta en el aire y luego la abraza.

—¿Me extrañaste?

—¡Mucho tío! Tú sales siempre de viaje.

—El tío tiene trabajo que hacer fuera de la ciudad. Es todo un empresario —él me observa unos segundos y sonríe —. Muy bien. ¿Ya nos vamos? —la pequeña asiente y yo tomo el abrigo de Naty para entregárselo.

—Ya sabes —le digo a mi amigo —. Asiento trasero...

—Y cinturón de seguridad muy bien puesto —completa por mí.

—Te quiero Lukas.

—Con K —añade y los abrazo a los dos para después dejar un beso en la mejilla de mi mejor amigo —. No quiero tus babas en mi cara.

Algo Cliché Pero Al Revés©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora