TRIXIE
—Despierta, mi amor —susurra, Zack dándome suaves besos por mi rostro y cuello.
Unas leves cosquillas cubren mi piel. Sonrío antes de abrir mis ojos y verlo muy cerquita. Parpadeo para adaptarme a la luz artificial del avión y friego mis ojos para quitar un poco de la somnolencia que me embriaga.
Por más que intenté que me diga el motivo de nuestro viaje no lo logré. Solo sé que mi padre lo ayuda demasiado porque fue capaz de prestarle su avión privado y eso es una buena señal.
—¿Qué hora es? —gimoteo y giro en la cama para ver a Zack acostado a un lateral mío.
—Cerca de la una
Refunfuño, perezosa y con muchas ganas de acurrucarme y continuar durmiendo.
—Tenemos que ir al hotel —sugiere y masajea mi cabello provocándome más sueño—. No podemos quedarnos aquí —advierte cuando vuelvo a cerrar mis ojos.
Maldigo. No me gusta nada que no me dejen dormir. Soy capaz de pegarlo sí no se calla.
—¿Por qué no? —gruño sin abrir mis ojos—. Tenemos una cama y por sí lo olvidaste con muy buenos recuerdos
—¿Cómo olvidarme? —ríe—. Sí lo planeaste todo para hacerlo posible
—Y sí que te quejaste —me burlo.
Zack, divertido, suelta una carcajada. Besa mi coronilla y se levanta de la cama. Abro mis ojos de inmediato y sigo sus movimientos.
—Trixie, hay que irnos —señala mientras se mueve en el pequeño espacio de la habitación recogiendo en una maleta un par de cosas que no logro identificar—. Ha pasado una hora desde que aterrizamos
—¿Qué? —cuestiono, confundida. Arrastro mi trasero y me siento contra el espaldar—. Pero sí me lo acabas de decir
Para y me regala una de sus deslumbraste sonrisas, esas que me hacen bombear el corazón y temblar las piernas.
—Lo sé, estabas tan cómoda que no quise despertarte
—¿Una hora? —repito, alucinada.
Se encoje de hombros y mira el reloj de su muñeca.
—Una hora y cuarto para ser exactos
Abro la boca sorprendida sin saber que decir con exactitud ‹‹ ¿Este hombre está loco? ››
—¡¿Me observaste dormir por una hora y cuarto?! —pregunto solo para asegurarme.
—Ajá, también roncar y babear —me jode.
—¡Zack! ¡No ronco ni babeo! —chillo y le aviento la primera almohada que alcanzo a coger.
Él la atrapa y la lanza a mi costado. Se sube a la cama, gatea y se ubica en medio de mis piernas. Me deja acorralada, los músculos de mi cuerpo hormiguean y una oleada de placer me recorre.
—Lo haces como una tierna bebita —me molesta y le saco la lengua. Él sonríe y de buen humor me reprende pellizcando mi cintura con suavidad—: malcriada...
—¿Qué hacemos aquí? —llevo mis manos a su cuello y aprovecho para indagar.
—Buen intento —pincha mi nariz.
—¡Zack, por favor!
—No te diré nada —advierte y abre la puerta de la habitación—. Abrígate, te espero fuera.
Sale de la habitación y hago una pequeña rabieta en la cama. Después de quince minutos abandonamos el aeropuerto en una camioneta privada y en una media hora más llegamos al hotel.
![](https://img.wattpad.com/cover/336997356-288-k891795.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Inevitable Atracción
RomanceTrixie no buscaba el amor ni creía en los sentimientos del corazón, sin embargo, el destino hizo que un hombre de preciosos ojos azules apareciera en el momento indicado para ayudarla. Por otro lado, Zack tampoco buscaba el amor. Estaba soltero, co...