Tanto tiempo quetengo de verla y ganas me detuve a preguntarle su nombre. Hoy la bautice comola Wera. Pese a todo es una mujer de piel clara, y aquí en México solemosapodar a la gente con alguna curiosidad que tenga a la vista. A mi me decíanJacobo en la preparatoria porque me parecía al personaje de crespúsculo, almenos en la cara, de físico ni un poco. Ahí destacaba otro aspecto, como el deNalgón. Solían decir mas ese apodo queel otro porque se me solía humillar mas de lo que se me respetaba. Asi sueleser la vida.
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Diario de Jacobo
Aktuelle LiteraturDiario personal de alguien que bien podría ser yo... aunque también tu, si es que eres tan sincero para escribir la verdad de tu vida.
