Por ella |URUSEI YATSURA|

Lo mucho que me costó renunciar

Esta vez se había pasado.

No necesitó comprobar si Mendo lo partía a la mitad con su espada, tampoco necesitó corroborar las caras de disgusto de todos los presentes seguido de un "ATARU" en diversos tonos de sorpresa o enojo. Mucho menos era importante verificar si Lum lloraba o no, incluso de espaldas a ellos sabía que estaba rota, mucho más rota de lo que lo que la hubieran visto jamás.

Supuso que Ataru también se había dado cuenta de la magnitud de su estupidez, no, de su crueldad, al comprobar que sus ojos salieron de sus órbitas y temblando comenzó a titubear acercándose a la oni que le daba la espalda

-L....lum

Después de aquello todo resultó demasiado rápido, la chica oni volando por los cielos sin emitir su esperada descarga eléctrica y el resto de los varones del aula acompañados de Mendo dando a Ataru la paliza de su vida sin que este pusiera resistencia

¿Serían capaces de hacerle daño? Lo dudaba mucho, siempre se había preguntando qué clase de super poderes había provocado la llegada de Lum en muchos de los habitantes de Tomibiki, incluyendo la peculiar fuerza que ella había obtenido. Pero Ataru era otra cosa, su resistencia y fuerza era bien conocida mucho antes de los alienígenas y espíritus llenando su vida.

Shinobu salió decepcionada del aula y aprovechando que en el jaloneo habían noqueado al profesor, se dispuso a caminar sin sentido por el corredor pensando en muchas más cosas de las que su cerebro adolescente podría soportar. En realidad, venía pensando en todo aquello desde el segundo juego de las atrapadas que se llevó a cabo sólo algunos meses atrás.

Gracias al estado real de Lum, la ciudad pudo levantarse en pie de nueva cuenta después de este evento; a veces olvidaba que ella era una princesa con acceso a múltiples herramientas de poder para solucionar problemas terrenales en un chasquear de dedos, como ocurrió en el inicio de su relación con Ataru.

"Su relación con Ataru"

A decir verdad, Shinobu comenzó a pensar en todo esto mucho antes, quizás en el incidente de las puertas del destino donde había conocido a Inaba. Su relación marchaba muy bien, se sentía probablemente como lo más correcto en su corta vida y aunque pocos eran los momentos que podían convivir, su inclinación por el romance mantenía viva la llama del amor con el rubio.

-¿Mi encuentro con Inaba también forma parte de los sucesos que se desatan con la presencia de Lum?

Pensar en ello le daba escalofríos, por lo que se propuso no analizarlo demasiado y simplemente disfrutar del tierno vínculo de lo que ella decidió llamar "mi primer (y espero único) amor correspondido"

"Estoy mintiendo, ese no fue el primero"

Shinobu suspiró y cerró los ojos recordando lo acontecido momentos atrás

——Flasback—

Era un día normal en el salón de clases, Ataru se atragantaba con su almuerzo mientras Lum leía sonriente un libro; después del segundo juego de pilla pilla varios esperaban que su relación tuviera un avance, aunque sea pequeño, no obstante, las cosas volvían al curso de siempre respecto al constante estira y afloja entre ellos.

Por alguna extraña razón, a Lum parecía no molestarle el nulo desarrollo de su relación con Ataru, parecía incluso feliz de ¿perseguirlo para siempre? De cualquier manera, nada de lo que se esperara de esta pareja debería estar apegado a la normalidad.

Las cosas evolucionaron de una manera increíblemente rápida, pasando de un Ataru corriendo tras la nueva compañera, Adi (que por cierto, no parecía repudiar al chico de igual manera que las demás compañeras) a Mendo y los demás compañeros de clase exigiéndole parar de ser infiel a Lum.