Grietas Del Corazón (Adrinette / Felinette)

capítulo 53: Soltar.

Marinette.

-Debo irme. En verdad te deseo lo mejor, busca a otra mujer y enamórate o no sé, pero por favor deja de insistir - En verdad me sentía estresada; Adrien ahora sabe que estoy aquí y donde trabajo. Mi miedo se cumplió.

-No puedo hacerlo.

-Lo siento, pero esto debe quedar así, podemos ser amigos, pero solo eso - negó con la cabeza, no paraba de llorar y en serio comenzó a invadirme la culpa y la desesperación al mismo tiempo. Me solté de su agarre y me alejé, él no me siguió y pedí un taxi.

No pude evitar llorar, mientras las luces de la cuidad chocaban contra mi rostro, pensé en decirle a Félix lo que pasó, pero eso solo lo alteraría y lo haría dejar su trabajo para venir de inmediato; no podía hacer eso o lo despedirán.

Cuando llegué a casa, ingresé a la entrada de mi casa y no a la panadería, mis padres aún trabajan, pero no tenía ánimos de que me interrogaran por tener los ojos rojos e hinchados.

Subí hasta mi habitación y me quité los tacones y me dejé caer en mi cama. Mi teléfono sonó y al ver que era Félix contesté de inmediato.

-Lo siento mi amor, tuve un paciente de emergencia, Claude me dijo que te llamó ¿estás enojada? - su preocupación por nuestro hijo me hacía sentir tranquila, había dejado a mi pequeño en buenas manos.

-No... Por supuesto que no Fel.

-Me dieron el día libre por esto, así que mañana estaré todo el día con nuestro hijo, tú no te preocupes.

-Gracias - fue lo único que pude decir, un nudo en la garganta me impedía seguir con la conversación.

-Cielo... ¿Estás bien?

-Lo estoy - mis mejillas se empaparon. En verdad quería desahogarme con él, pero no ahora. No cuándo conozco como es, solo serán diez días, no más - El día estuvo muy pesado hoy, es todo. Quiero dormir, así que te dejo.

-Entiendo, mañana te llamaré.

-Fel... - hablé rápido para que no colgara.

-Dime mi cielo.

-Te amo y también ya te extraño...

-Ja, ja, ja, ¿un día sin mí y ya me extrañas? - tonto, aunque tenía razón - yo también te extraño y me haces tanta falta, la cama se siente vacía sin tí y Louis me abandonó por dormir con su abuela - escuché como soltó un puchero - los días pasarán rápido y pronto estaremos juntos de nuevo - yo lloraba en silencio para no preocuparlo - descansa y recuerda que yo también te amo mi madame.

Sonreí ante sus palabras y terminé colgando para meterme a la cama. Todo lo que Félix me dijo cuando nos enteramos de la verdad, era cierto, no me mintió, solo que ahora tenía la versión completa.

Fue capaz de arriesgarse y darme libertad, pero él no contó que iba a ser indispensable en mi vida y que lo escogería a él, ahora estoy completamente segura de que fue el hombre correcto con quién me quedé.

...

Llegué temprano a la boutique y antes de tomar la puerta cerré mis ojos y rogué en silencio para que él no estuviera adentro, no quería verlo, pero tampoco quería meterme en problemas.