Capítulo 31: El niño de la calle

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Retrocedemos al invierno de unos 12 años.
Es 23 de diciembre y una pequeña T/n de 5 años esta escribiendo su carta para santa.
Lleva toda la mañana en dicha tarea, intentando ignorar los lloriqueos de su hermano que tiene meses de nacido.
¿Qué podía pedirle a santa?
Había hecho una lista de ideas la última vez que su amigo Tomohisa la visito... pero fue hace tiempo.
T/n hizo un gesto de disgusto, no sólo por no saber que escribir, si no que recordó algunas palabras de su amigo.
Tomohisa le había asegurado que ser hermano mayor era mejor que ser el hermano pequeño o ser hijo único, en su hogar sus hermanos mayores recibían más atención y eran el orgullo de su padre.
Pero en la familia de T/n era todo lo contrario, Eriko demandaba demasiada atención, sin importar lo que hicieran sus padres o ella, el bebé siempre estaba llorando.
Además estaba decepcionada porque se supone que debería tener una hermanita... y al final resultó ser niño.
También se sentía apartada, desde que su hermano nacio ya no jugaban con ella, ni pasaban tiempo en familia. Además Eriko tenía los ojos azules ¿porque ella era diferente?. Recién su padre le habló de Violeta... su verdadera madre, de quien casi era una copia, le contó maravillas sobre ella, pero no la recuerda debido a que había partido de este mundo el mismo día que ella nació.
Fue un gran impacto para T/n saber que Sakura no era su verdadera madre, ahora no sabía cómo tratarla y más que nada sentía que ya no pertenecía a su familia.
Entonces se le prendió el foco.
Santa cumplía cualquier deso y quería un hermano mayor, alguien tan diferente como ella para sentirse parte de su familia, que cuidara de ella y le enseñará cosas como los hermanos de Tomohisa.
Termino su carta, la dobló y la colgó en el árbol.
Apenas camino unos pasos cuando escucho nuevamente los lamentos de su hermano.
Sakura y las empleadas, iban y venían por toda la casa intentando apaciguar al bebé sin éxito.
T/n se fue a ver como caía la nieve por uno de los enormes ventanales de la mancion, se estaba quedando dormida cuando el ruidos motor del auto de su padre la puso alerta.
Corrió hacia la puerta de entrada para recibirlo, apenas el hombre la vio la cargó en brazos y le dio un beso en la mejilla.
Antoni: ¿como estas tesoro?.
T/n: bien, te extrañe papi.
Antoni: y yo a ti mi vida.
Apareció Sakura apurada con el bebé en brazos.
Que bueno que llegas, ya no se que hacer.
Antoni: seguramente también Eriko me extrañó.
Con cariño Antoni cargo a su bebé en su brazo libre y se lo mostró a su hija.
Curiosamente el bebé dejó de llorar, pero ahora su expresión era de enojó.
Sakura: porfin un momento de silencio.
T/n: ¿papi podemos ir al centro comercial? Quiero comprar juguetes.
Antoni: por supuesto solo déjame descansar un momento.
T/n: yeiiii.
Sakura: pero Antoni hace demasiado frío para los niños.
Antoni: será solo un rato, hace mucho que no salimos a pasear.
Sakura: bueno... ahora que lo mencionas me siento un poco sofocada en esta casa.
Antoni le sonrió y fue a darle un beso en los labios.
T/n hizo un gesto de desagrado he intento que su padre la soltará.
Pero Antoni la sostuvo con más fuerza y cuando terminó de besar a su esposa le dio muchos besos pequeños en la cara a su hija y luego a su bebé.
T/n se río a carcajadas y finalmente fue liberada del abrazo.
Tal como Antoni lo prometió, después de descansar y comer fueron a centro comercial.
Ambos niños estaban bien abrigados, había nevado demasiado esos últimos días y hacía mucho frío.
Debido a la cantidad de gente en las calles Antoni llevaba a T/n en brazos y Sakura a Eriko.
De camino al centro comercial T/n noto un parque lleno de luces, pero por el frío no le permitieron quedarse a jugar.
La familia estuvo buen rato en el centro comercial, más que nada en las tiendas para bebés, ya que a T/n no le agradaba ningún juguete.
Seguían en su recorrido hasta que Antoni recibió una llamada, bajo a su hija y le indico que guardará silencio.

Seguían en su recorrido hasta que Antoni recibió una llamada, bajo a su hija y le indico que guardará silencio

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Dueños de su destino. Rengoku Kyojuro X T/nDonde viven las historias. Descúbrelo ahora