En estos precisos momentos, era en los que deseaba haber hecho más ejercicio. Si hubiese levantado pesas como Yo le había sugerido tantas veces a principio del primer semestre, podría haber aguantado un poco más al sostener la puerta.
Pero no podía aferrarse a un "Si hubiese..."
El chico empujó la puerta de madera y Gun se tambaleó hacia atrás, intentando mantener el equilibrio al alinear sus brazos de manera horizontal.
- ¡Gun!
Mark se acercó a él rápidamente y trató de tomar su mano para ayudarle de alguna forma, pero el menor solo se limitó a retroceder, manteniendo una distancia considerable entre ambos.
- ¿Qué estás haciendo aquí?
Lo miró de frente sin intentar bajar la cabeza, no se sentía cómodo, pero tampoco avergonzado, esa etapa ya la había pasado hace algunas semanas. El joven ya lo había visto, se dio cuenta de su vientre, entonces ¿Para qué intentar negarlo?
-Estoy preocupado por ti, ya no asististe físicamente a la universidad y después me enteré de que estabas enfermo. Tus amigos no sabían mayor cosa y no contestaste mis mensajes, así que...
- ¿Cómo encontraste en donde vivo? Me atrevería a decir que me has estado vigilando, pero no he abandonado mi apartamento en más de dos meses.
Mark agachó ligeramente la cabeza en señal de vergüenza -Vi a Por en la entrada cuando iba camino a mis clases, supuse que te estaba visitando.
¿Siguió a Por? Eso quiere decir...
- ¿Has estado afuera de mi apartamento todo el día?
-No, no del todo. Escuché a través de la puerta y Por mencionó algo acerca del almuerzo, entonces me imaginé que estaría aquí todo el día. Fui a mi casa y regresé hace unos 40 minutos.
Increíble ¿Se daba cuenta de lo enfermo y retorcido que eso sonaba?
Cuando Gun no dijo ni preguntó nada más, el estudiante de medicina dio un paso hacia el frente, cuando el menor saltó ante el repentino movimiento, el contrario levantó una mano en señal de paz para calmarlo.
-No quise asustarte Gun, lo lamento. Es sólo que, cuando me enteré de que estabas enfermo, pensé que... - suspiró -Sólo, ya no quiero perder a nadie más.
La mirada en los ojos del menor se suavizó y su corazón casi saltó de pena ante la confesión, casi. Las circunstancias no le permitían ablandarse, estaba pendiente de cualquier movimiento extraño que el hombre pudiera hacer. Sus sentidos estaban alerta a cualquier señal de peligro.
-Estoy bien.
-Me doy cuenta - respondió y no pudo evitar que sus ojos viajaran nuevamente hacia su vientre. Gun no podía culparlo, debía ser algo sorprendente de ver por primera vez.
Cuando la mirada ya no se movió de su estómago, cerró inconscientemente la bata que llevaba puesta, intentando bloquear la vista. Aun así, se notaba, pero le hacía sentir más seguro el tener otra prenda cubriéndolo.
- ¿Eso es...?
Él asintió -Si.
- ¿Cómo? - se maravilló.
El más bajo suspiró con exasperación, no quería contar todo nuevamente y menos a Mark. Era una historia que se sentía demasiado íntima como para compartirla con él.
-Al parecer, puedo tener hijos. Lo descubrí cuando tenía ya dos meses. - fue lo único que dijo, ni más ni menos. Lo suficiente para meterlo en contexto.
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Mío, Tuyo, Nuestro.
FanficUna noche borrosa deja tras ella uno de los sucesos más extraordinarios en la vida de una mujer, pero ¿Qué sucede cuando el receptor de tan ansiado regalo, es un chico? ¿Es algo bueno o malo? Dependerá de la manera en que lo mires. No soy dueñ@ de l...