La noche siempre sería su parte favorita del día. Le encantaba ver a su amiga alumbrando en lo más alto, rodeada por sus pequeñas discípulas, las estrellas.
Puede confirmar ahora más que nunca, que caminar bajo un cielo estrellado es uno de los placeres más grandes de la vida. Sonrió levemente y apresuró el paso.
Le había pedido a Force que lo dejara dos cuadras antes del edificio de apartamentos. No deseaba que descubriera donde vivía y menos que era en una edificación lujosa de 5 estrellas. No tenía ánimo de explicar nada.
Caminó observando los negocios a su alrededor. Ahora que lo notaba, todo parecía pertenecer a otro mundo. Gente bien vestida, automóviles caros y comida gourmet.
Se sentía completamente fuera de lugar.
Aunque, no le dio mayor importancia. Estaba bastante cansado y necesitaba dormir hasta las 12:00 PM del día siguiente. Al menos, eso era lo que hacía todos los domingos.
Una costumbre que ya había echado raíces en su cuerpo.
Al entrar al apartamento, se preguntó si Tinnaphob había salido. Todo el lugar lucía oscuro y tétrico con las luces apagadas. Sin embargo, el aroma del mayor estaba presente en el ambiente, ese olor distante y delicioso a loción corporal.
Aspiró profundamente, disfrutando del aroma a masculinidad mezclado con...
-¡Ow!
Las luces lo cegaron y le obligaron a llevar las manos hacia sus ojos para cubrirlos de la intensa luz blanca.
-¿Estás bien?
Giró su cabeza hacia la voz y con la imagen aún borrosa, logró ubicar a Tinnaphob, estaba sentado en uno de los tres sillones color crema. Su postura era imponente, elegante y sexy.
¿Ah?
-¿El ruido de los motores te dejó sordo?
¿O simplemente me estás ignorando?Gun parpadeó tres veces seguidas para despejar la vista borrosa de sus ojos y los restregó suavemente utilizando el dorso de sus manos.
-Para nada. Tú por otro lado, casi me dejas ciego.
-Creo que estás exagerando, pero me disculpo- hizo una pausa- ¿Cómo te sientes?
Le hizo señas para que tomara asiento a su lado. El menor atravesó la sala con pequeños pasos y se sentó frente a él -Estoy bien.
Tinnaphob asintió mientras lamía sus labios de una manera bastante intrigante, atrayendo toda su atención hacia ellos. Eran de un color carmesí.
-Te estaba esperando para que podamos hablar.
-¿Hablar?, ¿Sobre qué o qué?
El pelinegro suspiró.
-Si vamos a hacer esto, necesito que me digas lo que quieres hacer cuando el bebé nazca. Creo que la buena comunicación será importante durante este proceso.
Había olvidado mencionarle ese detalle.
-Oh - incómodo - Yo... pienso que estaría más seguro con una familia que tenga los recursos y el tiempo para criarlo. Darlo en adopción es la mejor opción que se me ocurre por el m- ¿Qué?
La mirada en los ojos de Tinnaphob era fulminantemente aterradora. Lo veía como si hubiese cometido el peor de los crímenes y había recibido libertad condicional como pago.
-¿Darlo en adopción?, ¡¿Quieres deshacerte de mi hijo?!
-¿Disculpa?, Tú eres quien tardó una semana en buscarme, tenía que pensar en alternativas.
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Mío, Tuyo, Nuestro.
FanfictionUna noche borrosa deja tras ella uno de los sucesos más extraordinarios en la vida de una mujer, pero ¿Qué sucede cuando el receptor de tan ansiado regalo, es un chico? ¿Es algo bueno o malo? Dependerá de la manera en que lo mires. No soy dueñ@ de l...