La Reina de los Arax

📚Petrov📚

🚩Advertencia🚩
Contenido no apto para personas sensibles. Contiene violencia, palabras fuertes, violación y mutilación explícita. Leer bajo su propio riesgo

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Pov Jace

— ¿Crees que Hope esté bien? —cuestiona Efren a mi lado mientras yo conduzco hasta fuera de la ciudad.

— Estamos hablando de nuestra Reina, ella puede con todo —aseguré relajado y ansioso a la vez.

— No caigas en tu estado psicótico, no aun —pide y bufo ante esto.

— Tranquilo, puedo controlarme —mentí descaradamente.

Mis dedos sobre el volante picaban mientras pensaba en tantas maneras en que haría sufrir a ese hijo de puta.

Cuando rescatamos a la amiga de nuestra mujer no pudo haber más grata sorpresa que el cabrón fuese el capo de la familia Petrov.

Me voy a dar tanto gusto sacándole los órganos.

— Sé que no es cierto, eres quien más fácil cae ante nuestro estado —menciona mi hermano.

— Ya déjalo —Me quejo—. Además, tus pupilas se están dilatando, solo estás luchando contra ello.

Él se queda en silencio, porque lo que digo es cierto. Puedo notar como sus manos sudan y las seca contra su pantalón, se está conteniendo, pero sé que no lo podrá hacer por mucho.

Estaciono a un lado de la carretera y ambos bajamos del coche. Caminamos por un par de minutos entre aquel llano hasta que damos con una fábrica abandonada.

Escucho los gritos antes de abrir la puerta y veo como cinco de nuestros subordinados violan al desgraciado.

Gracias a la picota que lo mantiene cautivo queda en la mejor posición para que nuestros hombres hagan lo que quieran con él.

Es gracioso como intenta zafar sus manos y cabeza que se mantienen atrapados por la madera en aquella posición tan comprometedora.

Uno de los hombres lo embiste por el culo mientras otro se folla su garganta. Sus gritos son amortiguados por el pene que le atraviesa la boca mientras el resto se masturba y corre sobre él, poco después quien le viola el culo termina dentro de él mientras el otro estalla en su garganta.

— Eso, trágatelo todo —Le dice dandole palmaditas "cariñosas" en la cara.

Este le tira a morder y recibe un puñetazo en el rostro.

— Váyanse al infierno.

— Tranquilo, para la próxima seré quien te folle el culo —Le responde sin más.

Efren emite un silbido, llamando la atención de los chicos.

— Buen trabajo, ya pueden volver —avisa.

— ¿Tan pronto? —dice uno con voz apenada y le da una nalgada a la víctima de sus actos—. Es una pena, me quería divertir más con la puta.

Los cinco pasan por nuestro lado luego de arreglarse y nos dejan solos.

— ¿Saben quien soy? ¡Soy Octavio Petrov! ¡El maldito líder de la mafia Italiana! ¡¿Quienes son hijos de puta?! —exclama el torturado y yo río.

— ¿Oiste eso hermano? Al parecer Jay no hizo bien su trabajo, aun puede hablar luego de tener su pene en la boca —comenta Efren.

— Tu voz, yo la conozco —El maldito no puede vernos ya que la posición en la que se encuentra no se lo permite—. ¡Den la cara desgraciados! ¡¿Quiénes son?!