Estoy sentada en una mesa, sola, mientras bebo vino y reviso las redes sociales, intentando con todas mis fuerzas olvidarme de lo que me atormenta, pero es imposible.
Paola, luego de no haber encontrado a Perséfone, me pidió un momento para ver a su esposo el cual había llegado y se perdió entre el gentío con un hombre castaño de buenas complexiones, no quiero imaginarme a donde.
Este lugar estaba lleno de falsas e hipócritas sonrisas con disfraces de amigos. Muchos se me habían acercado a preguntarme cual era mi relación con los Arax.
Siguiendo el consejo de Pao: Mirada al frente, sonrisa ligera, no hables de más, mientras más información tengan de ti más podrán usar en tu contra; los despaché a todos con educación.
« Estoy aburrida. »
— Hola Nena, ¿puedo acompañarte?
Levanto la vista de mi teléfono hacia la hermosa mujer ante mí y mi cuerpo grita un enorme LESBIAN PANIC, pero así, en mayúsculas.
— Sí, por supuesto —acepto, guardando la calma, y dándole paso a acompañarme.
La mujer pelinegra ante mí lleva un hermoso vestido oscuro de una sola manga, con una abertura a cada lado de sus piernas y su cabello oscuro, rozando su cadera, se halla sujeto en un moño alto.
El vestido no intenta en ningún momento cubrir la tinta de sus tatuajes los cuales se extienden por su cuello, entre sus senos y sus brazos, de manera sutil pero erótica. Sus ojos oscuros que parecen mostrarte el infierno se posan en mí de manera gentil.
Toma la silla, arrastrándola hasta quedar justo a mi lado en aquella mesa y toma asiento de manera elegante.
— Creo que Paola debió habernos presentado. Mi nombre es Sheira Bane, un gusto.
« OMG! ¡Su voz es tan...! »
— Un gusto Sheira, mi nombre es Hope —Me presento.
La mujer ante mí fue descrita como la asesina más peligrosa y buscada del mundo, quien era novia del compañero del agente de la DEA, protagonista del libro donde Efren era el villano y quien estaba bajo un nombre e identidad falso. Perséfone o Sheira, como era nombrada, fue perseguida constantemente por el protagonista quien afirmaba que ella andaba en malos pasos aunque nunca pudo demostrarlo.
Era un personaje al cual quise darle más protagonismo, incluso se vuelve antagonista de Carolina, la prota, a pesar de que ella y el protagonista masculino no tenían ninguna conexión romántica. Sin embargo, su personaje magnético, sensual y empoderado siempre fue visto de manera positiva por los lectores y por mí misma.
¡¿Cómo carajos es que alguien como ella llega a conocer a Alessandro Bane?!
Ambos personajes son demasiado parecidos en carácter, deberían chocar y no de buena manera.
— Sí, sin duda eres la amiga a la cual se refería —comento algo nerviosa.
La veo cruzar una de sus piernas sobre la otra, mostrando sus muslos a causa del atrevido vestido. Me ofrece una pequeña sonrisa que puede ser calificada como seductora, a pesar de que tal vez no quiera que se vea así.
— Bonita armadura, nena. Pao tiene buen ojo, sin duda alguna.
— También luces increíble —alago y por primera vez puedo ver que sonríe con naturalidad.
— Es el primer cumplido de manera sincera que me han dado en la noche —murmura y levanta su mano en señal a un mesero para que se acerque con bebidas.
Este acata y nos da un par de copas con una botella de vino tinto y un plato con rodajas de queso y jamón.
— ¿Por qué dices eso? —frunzo mi ceño—. Muchos debieron decirte que estás hermosa.
ESTÁS LEYENDO
La Reina de los Arax
Teen Fiction¿Te gustaría poder traer a la vida real a tus personajes literarios? Sería genial, ¿a que sí? ¿Pero que pasa cuando los personajes que creaste aparecen en tu realidad? Tal vez...¿cool? Pues no lo es cuando son personas de poca empatía, estabilidad...