📚Formal📚

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Pov Hope

— ¡Hope!

« Hay no. »

Un agarre en mi mano hace que me desvíe hacia la dirección contraria, siendo guiada por Karol. Nos detenemos al entrar a uno de los baños de mujeres y ella cierra la puerta.

— ¿Cómo es eso de tres novios? —pregunta.

« Y aquí vamos. »

— Bueno...—¡Diablos! ¡¿Como explico esto?!—. Es complicado.

Ella rueda los ojos.

— Al menos dime quienes son —pide.

— Los tres socios de mi padre —Me encojo de hombros.

Ella me mira seria por unos segundos hasta que explota con un gran chillido de fan loca.

— ¡¿Ya te los follaste?! —pregunta emocionada.

Blanqueo los ojos.

— Eso es lo único que te importa ¿cierto? ¿Que pasó con la parte de: Se aman?

— Ya no somos niñas de secundaria —Se queja—. ¿Lo hiciste o no?

— Si —afirmo y se sorprende.

— Espera...—Lo piensa por unos segundos—. ¿Nuestro profe de economía no es una de los socios de tu padre? —hago una mueca y ella tapa su boca, sorprendida—. ¡Te estás cogiendo al profe de economía!

Tapo su boca, asustada.

— No quiero que se entere medio universo ¿sabes?

Ella asiente fervientemente con su cabeza y destapo su boca.

— Entonces...¿dejaste de hacer tarea y recibiste tu castigo? —pregunta burlesca.

« Oh sí, delicioso castigo. »

— Karol, ya basta —advierto avanzando y ella se une a mi lado.

— Tomaré eso como un sí —canturrea.

(...)

Llego a la casa y quito mis zapatillas en la entrada. Siento un olor delicioso viniendo de la cocina y frunzo mi ceño.

— ¿Hola?

— Bombón, bienvenida —escucho la voz de Efren y me relajo.

Camino hasta la cocina donde lo veo. Aquel hombre de 1.84 de altura vestía mi adorable delantal oscuro con estampado de ositos mientras cocinaba.

— ¿Por qué te quedaste ahí? Pasa —pide.

— Solo pensaba —comento acercándome a él y dejando un beso en sus labios el cual profundiza al tomar mi culo y atraerme a él, besándome con fuerzas mientras aun removía el arroz con la otra mano.

— ¿En serio? ¿En que pensabas? —pregunta sobre mis labios.

— Se me olvidó —comento con una pequeña sonrisa y una de sus comisuras se eleva.

— Ve a darte un baño en lo que termino la cena —ordena.

Asiento con mi cabeza pero antes de apartarme lo suficiente me pega una nalgada que me hace dar un pequeño brinquito.

— ¡Ef! —chillo.

— Ve a darte el baño Bombón —dice burlesco y yo río mientras me dirijo a mi habitación.

Luego de darme un largo un baño coloco una camisa de las de Ef sobre mi cuerpo, porque sí, ya mis tres novios han invadido mi armario, y me dirijo al comedor donde está él terminando de poner la mesa.

La Reina de los AraxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora