Como pude me separe de Alfredo, pues estaba siendo muy brusco y comenzaba a lastimarme.
-No quieres que te bese o que cabrones traes plebe- claramente se había molestado porque no lo deje seguir.
-No es eso mi amor, solo que estas siendo un poco brusco y me estas lastimado- lo abrace para tratar de calmarlo.
-Mmm esta bien, quieres comer algo ?
-No, no tengo hambre lo que quiero es acostarme, estoy cansada.
-Vienes llegando de vacaciones y estás cansada jajaja.
-Ya se, esto de estar embarazada de dos es muy casado.
-Vamos pues a acostarnos un rato.
Deje mi bolso en la sala y camine con el rumbo a nuestra habitación, en cuanto entramos cerró la puerta con seguro y avisó a sus hombres que no lo molestaran a menos que fuera de importancia, mientras él hacía eso yo me quite la ropa y me acosté solo con ropa interior, cuando me vio sonrió e hizo lo mismo, se quedó en bóxer y se acostó.
-Los extraño mucho amor, me dijo mientras me abrazaba.
-Nosotros a ti también amor la verdad.
Después de eso comenzó a besarme posesivamente, sin duda moría de ganas de que hiciéramos el amor. Comenzó a desender sus besos hacia mi cuello y mis bubis.
-No mames amor el embarazo te esta poniendo más buena.
Yo no pude ni contestarle ya que solo salían gemidos de mi boca.
Siguiendo besándome y con su mano tocando mi zona íntima, yo de verdad ya lo necesitaba dentro.
-Alf ya te necesito dentro porfavor. Le esta rogando.
-No te la voy a meter hasta que me prometas que no te vas a volver a ir a algún lugar sin pedirme permiso. - Yo de verdad me quedé sorprendida pues pensé que no le había importando y el se estaba aprovechando de mi vulnerabilidad.
- Alf por dios, ya. El seguida besándome.
-Ya te dije Isabella. Nunca solía llamarme así, solo cuando estaba molesto.
-Te lo prometo.- fue lo que pude responderle, después de esto me dio una fuerte nalgada y entró en mi de forma violenta, que realmente me dolió, estaba siendo muy salvaje y dejándome chupetes por todo el cuerpo, yo me asuste un poco por la seguridad de mis bebés.
-Alf, me está doliendo, tranquilo recuerda que no podemos ser muy bruscos por los bebés.
Pero parecía segado pues no me hacía caso y hasta cierto punto me gustaba que fuera así, pero realmente no quería tener consecuencias en mis bebés por esto. Después de varios minutos yo sentí mi orgasmo y llegué junto con él.
En cuanto esto paso me serpare de él.
-Alfredo no podemos hacerlo así, le.dije mientras lo miraba a los ojos.
-Claro que puedo eres mi mujer y tienes que poder. De verdad estaba siendo muy estúpido.
-No lo digo por nosotros, si no por la seguridad de los bebés. Le respondí bastante molesta.
- Los bebés están bien y cállate cabrona que no me tienes muy contento, que no se te olvide que sola no te mandas y de aquí en adelante no me vas a poder salir a ningún lado a menos que yo quiera te quedo claro. Mientras me decía esto me tomo de manera muy brusca del mentón.
-Alfredo me lo dices enserió. Pensé que talvez estaba bromenado.
-Claro que es enserió Isabella, a mi me respetas y no te andes sintiendo la muy chingona de irte sin mi permiso.
-No tengo que pedirte permiso para realizar mis cosas. Estaba bastante molesta por su actitud.
-Pues lo vas a hacer quieras o no, cuando dijo esto me sujeto del cabello fuertemente. Ya estaba asustada pues ya me había golpeado una vez.
-Alf me estas lastimado, le dije mientras algunas lágrimas rodaban por mis mejillas.
-No llores, solo quiero que te quede claro. Y ven para que hagas algo de comer.
Después de esto se paro de la cama y me jalo para que yo lo hiciera, estaba muy asustada así que rápidamente me puse una pijama y salí para ver que podía hacer de comer, ya que no había hecho el mandado en días.
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Hola, aquí les dejo un nuevo capítulo. Perdón por tardar tanto en actualizar pero tengo mucho trabajo.
Gracias a tod@s por leer mi historia, votar y dejar sus comentarios.
