Después de que el doctor me hiciera algunas preguntas sobre cómo me encontraba, decidió ponerme un suero pues dijo que me estaba deshidratando y me recomendó acudir a un chequeó médico pues dijo que no me veía del todo bien y necesitaba hacerme estudios para saber mi estado de salud con mayor precisión. Le comenté que si, que en estos días asistiría a su consultorio para realizarlos.
Después de eso el doctor se retiró, Alfredo estaba en la misma habitación conmigo, me sentía tan mal pero aún así me molestaba si presencia.
-Debes tener más cuidado cuando bebas alcohol Isabella, fíjate cómo te pusiste.. tú nisiquiera tomas yo no sé ahora porque te pusiste así- comento Alfredo, quien estaba sentado al lado de la cama donde me encontraba recostada, pues aún tenía la intravenosa que me estaba suministrando el suero.
Me molestaba tanto el que me dirigiera la palabra. Pero necesitaba desquitar el coraje y resentimiento que sentía, así que le contesté.
-Que te valga, si decido tomar o no .. no es cosa que te importe.- le respondí.
-Como putas no me va a importar si mira como te pusiste, quiensabe que te pondrían en la bebida tus putos amigos, porque mira como estás.- me respondió gritándome.
De verdad que era un sínico este hombre.
-Mis amigos no me pusieron nada en la bebida, yo tomé como si no hubiera mañana porque así lo quise, quería celebrar y como ya te dije que te valga. Y ya déjame en paz, y lárgate del cuarto vete a seguir la fiesta.
-Ya te dije que aquí me voy a quedar y cual puta fiesta no hice nada malo ya te dije, los plebes trajeron esas morras pero yo no hice nada. Así que olvídalo.
-Estas pendejo o que alfredo.-nunca le había faltado al respeto, pero hoy realmente me tenía arta.- estabas todo embarrado de labial, tenías a tu lado a una muchacha casi desnuda y no hiciste nada por dios, no seas mentiroso.-De nuevo ya sentía estás malditas ganas de llorar.
-Si ya la cagué en eso pero no me metí con ellas ya te dije y te lo juro por lo más sagrado que tengo que no lo hice ... Y bájale a tus mamadas y no me faltes el repeto cabrona.
No le respondí nada ya no quería seguir hablando con él, realmente me sentía fatal me dolía demasiado la cabeza estaba cansada con ganas de llorar y con los sentimientos a flor de piel. Alfredo al igual ya no dijo nada.
Después de casi dos horas el suero se había terminado y me retire la intravenosa yo sola, pues no me daba miedo hacerle y sabía.
Aún me sentía fatal, pero me pare casi corriendo al baño pues las ganas de vomitar me invadieron de nuevo, no se cómo no me desmayé mientras corría al baño, pues todo me daba vueltas. Me tire junto al retrete en cuanto entre al baño y comencé a intentar vomitar, pero no tenía nada en el estómago, así que no vomitaba nada, no me di cuenta ni en qué momento entro Alfredo y me comenzó a tallar la espalda para intentar calmarme, sentía que me iba a morir realmente.
Después de que logré calmar mis ganas de vomitar, Alfredo me ayudó a ponerme de pie, pues yo realmente no podía. Comenzamos a caminar hacia la cama y me ayudó a recostarme en ella, pero de un momento a otro se pudo serio y me preguntó. -Bell estás en tus días.- no se ni porque pero no comprendía su pregunta,-en mis días.-me límite a contestar.
-Si Bell, en tus días, que si tienes la regla.-seguia sin entender porque me preguntaba eso pero estaba segura que no estaba en mis días.
-No Alfredo no estoy en mis días porque ?.
-Bell estás sangrando.- fue todo lo que me respondió y al instante volte a ver mis piernas, se notaba sobre mi pantalón de pijama que tenía un sangrado vaginal, pero no sabía ni porque, me perdí tanto en eso y en el miedo que me invadio que no me di cuenta en qué momento Alfredo ya está a sentado a mi lado hablándole al doctor.
-Calmate Bell el doctor está por venir y me dijo que vendría una ginecóloga con ella.- creo que se había dado cuenta de lo asustada que estaba.
-No se porque estoy sangrando Alf esto nunca me había pasado.- comencé a llorar pues realmente estaba asustada.
-Calmate amor si, ahorita llegan los doctores, el hospital está a diez minutos de aquí no deben tardar.
Él estaba tratando de tranquilizarme, pero conforme pasaban los minutos yo más nerviosa me ponía.
Después de alrrededor de quince minutos llegaron los doctores, el doctor Luis, quien ahora estaba acompañado de una doctora la cual se presentó.
-Un gusto señorita, mi nombre es Mónica Gómez y soy Ginecóloga.
Yo solo asentí pues no sabía que decir, así que el doctor Luis comenzó a hablar con ella sobre lo que me había pasado hace unas horas.
Ella comenzó a hablar tratando de tranquilizarme.
-Isabella, todo va a estar bien va trata de cálmarte y dime si usas algún método anticonceptivo y si es así desde cuándo lo haces.
-Si uso los parches anticonceptivos desde hace como 6 meses.
-Nunca habías presentando problema alguno con ellos, me refiero a emoragias, u otros malestares.
-No nunca, es la primera vez que me pasa algo así.
-Ok entonces, dime hace cuánto tuviste tu periodo.
-El mes pasado.
-Mira te vamos a practicar una prueba de embarazo casera va, no es la más confiable pero podemos darnos una idea y partir de ahí va.
No lograba procesar todo lo que estaba pasando y ahora había una posibilidad de estar embarazada, sin duda estaba aterrada, busque con prisa a Alfredo el cual estaba sorprendido también pero nada en comparación conmigo y creo que lo noto.
-Bell amor calmate si, todo va a estar bien.
La doctora se acercó a mí y me dijo que era mejor hacer una prueba de sangre y que ya venía el químico que tomaría la muestra, la cual estaría lista en media hora. Y así fue después de diez minutos llegó un químico tomo la muestra de sangre se retiró y mientras la doctora me reviso. No me dijo nada solo me dijo que me daría un medicamento para contener la emorragia.
Yo aún seguía intentando procesar todo, estaba sumamente asustada, pues si realmente estaba embarazada, el día de mi graduación había consumido demasiado alcohol, estube rodeada de personas fumando y todo eso me estaba haciendo sentir una culpa inmensa.
Después de más de 40 minutos el químico regreso con las pruebas, Alfredo se puso al lado mío y tomo mi mano, le dió un apretón y se acercó a mi oído para hablar.
-Calmate mi amor todo estará bien va, sea lo que sea vamos a estar bien.- yo solo me límite a asentir pues ya estaba llorando del estrés que sentía.
La doctora tomo los resultados, los abrió y comenzó a leer lo que decían. Después de unos minutos finalmente hablo.
-Bien Bell, pues felicidades estas embarazada...
Esas palabras no dejaban de repetirse en mi cabeza, estoy embarazada... Algo que realmente no sabía si quería en este momento y en estás circunstancias.
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Holis ... Aquí les dejo este nuevo capítulo, espero les guste y lo disfruten
Muchísimas gracias por todo el apoyo que le dan a la novela de verdad 🙏🏼🙏🏼🙏🏼
Trataré de actualizar más seguido ...
Gracias ❤️
