Rubius regresa sediento de venganza contra su hermano, quien le arrebató todo: sus padres, su novio, sus sueños y su vida. Pero la revancha se complica cuando debe esquivar cada malévolo plan de su hermano. En un giro inesperado, al caer en una de s...
-Amor, ¿por qué viniste? ¿No te dije que no tenías que recogerme?-Lolito era como un pajarito mientras revoloteaba felizmente hacia su hombre.
-Estaba preocupado. Está lloviendo afuera- Mangel se quitó la chaqueta para cubrirlo con una mirada infeliz-¿Por qué vas tan descubierto?
La expresión del pelinaranja era tan dulce como la miel.
-Oh tú, cuántos años crees que tengo? ¡Todavía me tratas como a un niño!
Rubius estaba inestable mientras se presionaba contra la pared helada y sentía que tenía mucha mala suerte.
Durante toda la noche, sintió que si no fue testigo del amor paternal dirigido a Lolito, entonces fue un espectador de la vida amorosa del mismo.
Como si esto no fuera suficiente, el cara zanahoria agarró deliberadamente el brazo de Mangel y lo llevó hacia él, diciendo cálidamente:
-Hermano, puedo ver que has bebido demasiado. ¿Qué tal si nos vamos juntos? ¡Haz que mi novio te lleve de vuelta a casa!
Lolito enfatizó intencionalmente la palabra "novio".
Sólo entonces Mangel notó a Rubius. En el momento en que lo vio, sus pupilas se contrajeron.
Rubén...
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Ya había pasado mucho tiempo.
No se habían visto ni una sola vez durante esos años que él estuvo en el extranjero, y después de su regreso, él solo lo había visto desde muy lejos cuando recogió a su novio de la compañía unas cuantas veces.
No estaba preparado para lo que vio: el rubio había cambiado tanto que casi no podía reconocerlo.
Ese chico que siempre había usado trenzas y vestidos florales en el pasado se había convertido de alguna manera en un omega que podía capturar los corazones de todos los hombres...
Al notar la mirada de Mangel sobre Rubius, un rastro de hostilidad pasó por los ojos de Lolito mientras tiraba de su brazo.
-Amor, ¿qué dices?
El de anteojos salió de su ensoñación e inmediatamente asintió con la cabeza.
-Sí, vayamos juntos.
-Hermano... ¿Hermanito? ¿Está bien?-Lolito fingió estar preocupado.
El ojiverde agitó la mano y negó con la cabeza. Debido al alcohol, su mente se estaba volviendo más confusa, su corazón latía más rápido y su sangre corría hacia atrás. Se sentía como si hubiera una bestia rugiendo dentro de su cuerpo, queriendo salir y destrozar las dos caras falsas que tenía delante.
-No es necesario...-Rubius tropezó en dirección al baño antes de perder el control.
El pelinaranja sonrió ante el lamentable escape del rubio, pero cuando se giró para mirar a Mangel, su expresión era de dolor y tristeza.
-Amor, Mi hermano no parece querer perdonarme... Ya trabajé muy duro para compensarlo. En la empresa, traté de cuidarlo y, sin embargo, él me sigue detestando... Realmente no sé qué más puedo hacer...
-No te preocupes, Rubén siempre ha sido así. ¡Dale tiempo y eventualmente te perdonará!- Mangel lo consoló en voz baja.
Afuera del hotel, los omegas del equipo admiraban con entusiasmo el auto de alta gama de Mangel.
-Acabo de comprobarlo, este Maserati vale al menos 10 millones, ¡es muy caro!
"Yo también quiero encontrar un novio rico, ¡cuántos años me llevará!
-Más importante aún, ¡es tan guapo! Muchas celebridades se casan con ricos, pero todos son hombres gordos de bastante edad, ver eso realmente me revuelve el estómago...
...
Mientras todos chismorreaban, vieron a Mangel y Lolito salir juntos del hotel.
Una pareja guapa parada junta realmente llamó la atención.
Todos observaron con envidia cómo el pelinaranja, con la chaqueta de Mangel encima, entró en el lujoso auto, y solo después de que el auto estuvo fuera de la vista soltaron suspiros anhelantes.
Pero no mucho después de que el auto se hubiera ido, hubo un repentino sonido penetrante cuando una silueta blanca plateada apareció y se acercó. Era un auto deportivo que pasaba a toda velocidad y se detuvo justo en la entrada del hotel.
Más importante aún, este auto...
¡Este auto era demasiado deslumbrante! Un chasis tan atractivo y bajo, una carrocería lisa y puertas de tijera geniales: era una obra de arte...
Y aumento la importancia aún más, el precio...
-No me jodan, ese es el Bugatti Veyron SuperSport, el auto deportivo más caro del mundo. Cuesta aproximadamente más de mil millones de euros... madre... qué dios de la fortuna es este...
