🖤43🖤

106 9 2
                                    

La luna estaba en su punto más alto, en el ambiente sólo se podían escuchar el sonido de las olas estallando contra las rocas, el canto de los grillos y las ranas y las palmeras batiendo sus hojas por la brisa fría. Jimin y Jungkook habían salido de la casa de los papás del último haciendo el mayor silencio posible para no despertarlos, bajaron hasta la playa agarrados de la mano, para luego comenzar a recorrerla a paso lento, disfrutando del relajante ambiente.

— Talvez no sea tan bella como la playa de Jeju, pero... Esta playa tiene un valor muy significativo para mí... — Dice Jungkook mirando al frente — Aquí me refugiaba de mis penas, este era el único lugar en el que podía poner mi mente en blanco...

— ¿La extrañaste? — El contrario asintió.

— ¿Y que mejor regresar a este lugar tan valioso... Con una persona tan valiosa? — Jimin sonrió por esto.

—... Esta playa es mil veces más bella que la de Jeju, más que todo... Por la tranquilidad que transmite... — Dijo Jimin mirando hacía el mar, mientras la brisa le pegaba en la cara.

Los dos se sientan sobre la arena, frente al mar, casi a los pies del mar, aunque se mantenían en silencio, la comodidad era lo que habitaba en el ambiente. Los dos estaban con sus manos entrelazadas, Jimin estaba recostado en el hombro del más joven, así cómo él lo abrazaba por la espalda.

— ¿En qué piensas? — Preguntó Jimin mientras fijaba sus ojos en el perfil del menor.

— En ti... Estando en tu presencia, en lo único que puedo pensar es en ti... — Le responde el menor mirándolo con una sonrisa, contagiando al ojiverde.

Jimin se enderezó y se sentó sobre las piernas del contrario, sin dejar de mirarlo fijamente, mientras este sólo analizaba cada parte de su rostro.

— Eres algo sagrado e intocable en mi vida, Jungkook... — Dice Jimin acariciando el rostro del contrario, sin despegar sus ojos de los del menor, que brillaban tanto como un par de luceros — Quiero que sepas y que te grabes bien lo que te voy a decir, mi amor, ¿Entendido? — Dijo Jimin tomando ambas manos del menor, dejando un beso en ellas, el menor sin entender nada asiente — Sin importar lo que pase, siempre, óyeme bien... Siempre serás mi prioridad, lo que más me importa en esta vida, es que tú estés bien...

Jungkook sólo lo mira sorprendido, así como una lágrima traicionera se coló por su mejilla, luego abrazó fuertemente al mayor, escondiendo su rostro en su pecho.

— Siento esas palabras como si fuesen una despedida... — Jimin sólo acarició su cabello.

— No lo es, no te vas a librar de mí tan fácilmente... — Respondió el mayor con una sonrisita.

— ¿Acaso yo me quiero librar de ti?, eso jamás... — Responde el más alto.

Acto seguido, Jimin se lanzó sobre Jungkook, haciendo que quedara recostado sobre la arena, con él encima suyo, mirándole nervioso.

— ¿Sabes algo, mi amor?... La vez que, te encontré bajo la lluvia, luego de que esa chica que te gustaba te rechazará, describiste como siempre eras el excluido de todo, eso se me quedó grabado en la memoria y, desde ese momento siempre quise decirte algo... Pero si lo decía, hubiese delatado mis sentimientos y para ese momento, no era adecuado... Así que, te lo diré apenas ahora...

Jungkook sólo lo miraba algo confundido y a su vez, ansioso por saber lo que su amado tenía para decirle, que imaginaba que era algo hermoso, por venir de Jimin... Quién para él era el hombre más hermoso del mundo.

— Si yo te hubiese conocido desde niño... Siempre te hubiera elegido a ti. Me hubiese acercado a tus amigos para decirles que me presentaran contigo por qué me parecías el hombre más hermoso del mundo. Nunca te hubiese excluido porque serías el centro de mi universo, nunca te hubiese hecho menos que nadie ni mucho menos te hubiese comparado con nadie más, porque cómo tú ninguno... Jamás te hubiese dejado solo en los talleres en grupo, siempre tendrías el 100% de mi atención y desde siempre te hubiese mirado, dedicándote mis más bellos sentimientos y mis más ardientes deseos... — Jungkook sólo lo miraba completamente sonrojado — Y sobre todo, jamás te hubieses quedado solo... Porque yo te hubiese seguido hasta el fin del mundo...

Una Fiebre Llamada AMOR • (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora