El ajetreo del desfile comienza desde temprano, un chófer viene a recogerme al hotel para llevarme al salón donde será la presentación.
Al llegar hay un montón de gente corriendo de aquí para allá y de allá para acá, ordenando sillas alrededor de la pasarela, colocando flores en macetas doradas, colgando candelabros de cristal en el techo y todo tipo de adornos alusivos al tema de la gala y en lo que están inspirados los vestidos que es la época victoriana, en el camerino es lo mismo, todos tratando y dando lo mejor de sí para que todo salga a la perfección, faltan pocas horas ya que el evento será por la tarde.
-¿Estás nerviosa? -pregunta Maya cuando Patrick se aleja en busca del organizador.
-Un poco, pero ya se me pasará. -la abrazo.
-Vengan por aquí señoritas -una morena baja nos guía a una puerta a un costado- este será tu camerino esta tarde, lo compartirá con otra modelo.
Detrás de la puerta el espacio es pequeño, hay un sofá, un tocador negro con un espejo con luces alrededor y un perchero donde cuelgan todos los vestidos que modelaré hoy.
La morena sale y a los pocos minutos entra el maquillador, desplega todos sus implementos de trabajo en el tocador y comienza con su labor.
Primero el cabello que lo recoge en una coleta alta con algunos mechones sueltos y adorna con una especie de tiara dorada, después continua con el maquillaje, es algo muy sencillo ya que lo que se quiere es que el protagonismo sea para los vestidos, así que solo me prepara la piel dejándola tan perfecta que parece que no llevara nada y peina mis cejas rellenando los espacios libres.
Después de una hora estoy lista, solo esperando las indicaciones de cuando debo vestirme.
Maya, que había salido de la habitación vuelve corriendo a decirme que ya los asistentes están comenzando a ocupar los puestos y Nahomi viene detrás, con ella es con quién comparto el camerino y también viene a vestirse.
A través de los altavoces se puede oír al presentador dando la bienvenida e iniciando el desfile, la primera chica sale a la pasarela y como soy la segunda Patrick viene corriendo a ayudarme con el vestido. El primero que me pondré es blanco, con detalles negros y dorados en la parte del frente, escote corazón, hombros al aire y mangas largas que caen sueltas en mis brazos.
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Haciendo los nervios a un lado salgo de un lado del escenario y me paro en el centro, inicio mi caminata estilo catwalk lento con la mirada en alto y mi rostro con una cara neutra, no está permitido sonreír ni cautivar al público como piden en otras ocasiones.
Detallo a las personas en los asientos como puedo sin voltear la cara, debo mantenerla siempre viendo al frente. Mi corazón da un brinco y no sé por qué los nervios me vuelven a atacar cuando distingo a Burak entre el público, lo invité ayer a última hora y pensé que no vendría pero está en primera fila.
