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Elrik.

Mí vista se va directo a la fogata que tengo a un metro de distancia viendo como las llamas suben. Me hubiera quedado en la habitación de no ser porque Einar me trajo casi a rastras.

Y para ser sincero también vine para ver con mis propios ojos si Abrahel se atreve a venir después de le haya dicho que no. Y conociéndola se que vendrá.

A mi lado se encuentra Einar que, de un momento a otro, se acerca más a mí y en una voz baja me pregunta:

-¿Gabriel todavía no se da cuenta de la mercancía que le falta? -su voz se escucha un poco preocupada.

Por unos segundos no digo nada o me muevo. Solo miro la fogata sintiendo su mirada en mí perfil.

-No a comentado nada -el suspira aliviado-. Pero ha estas alturas ya debe de saberlo -me giro a verlo para encontrarlo con su rostro contraído-. ¿Qué pasa? No pongas esa cara, idiota, no tiene forma de saber que nosotros fuimos y si eso pasa, diré que fui solo yo.

-Te mataría -asentí. Es mí padre pero eso no hará que se detenga en volarme los sesos como lo hace con todo aquel que lo traiciona.

-Y es por esa razón que, si todo sale mal tú serás el primero junto a Hilai en irse lo más lejos posible donde Gabriel jamás los encuentre -mi voz sale lenta, tranquila y serena, es como sí el miedo ya no existiera en mí.

-¿Eso te convierte en un buen amigo o en un idiota? -pregunta sin gracia y aún así eso hace que una risa salga de mí.

Me encojo de hombros.

-Supongo que en ambas.

-¿Acaso no tienes miedo, Elrik? -su voz suena molesta.

-Cuando ves todo lo que yo he visto y vivido entenderás por qué hace mucho le perdí el miedo a Gabriel Allister -zanjo y él solo hace una mueca de irritación total.

-Pero todo saldrá bien, ¿No? -dice, pero en su voz suena intranquila-. Los tres nos iremos, lejos de toda la mierda que nos tocó vivir una vez terminemos el colegio, ¿Verdad?

¿Como le explico que desde que supe que me estoy enamorado de Abrahel mis planes están empezando a irse por la borda? ¿Cómo le explico que sí ella me pide que me quede, lo haré sin pensarlo?

-Primero tenemos que deshacernos de toda esa mierda que aún nos queda, Einar -puntualizo. Todavía nos queda por vender tres kilogramos.

-Ya sabes que de eso yo me encargo -dice con orgullo haciendo que negara.

Nos quedamos callados ambos, volviendo a mirar la fogata. La necesidad de sacar un cigarro y inundar mis pulmones de nicotina hacen que saque uno y de inmediato prenderlo. Últimamente he estado fumando mucho.

Einar es mí amigo, mí hermano, pero a lo largo de los años he visto como ha cambiado y como se mete aún más con personas del bajo mundo solo para conseguir lo que quiere.

Al principio solo negociaba con personas ricas, pero que no tenían influencias, pero ahora... es diferente.

-Dime la verdad, Elrik -la seriedad de sus palabras hacen que lo mire-. ¿Sigues queriendo usar a los Canwell de carnada?

Trago saliva y mi silencio lo dice todo. Haría lo que fuera por ella. Yo viviría y mataría por ella, pero eso no hará que yo cambie de mi plan original. Destruir a todos los que tuvieron que ver en ese accidente que provoco que todo cambiará. Sin ese accidente mi vida hubiera sido distinta a lo que es hoy.

-Tienes que decirle la verdad a Abrahel -Me mira con seriedad, con determinación y seguridad-. Ella tiene que saber el por qué te acercaste a ella y lo que harás.

Por Favor, No Me Odies [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora