28. La verdadera.

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Nunca tendrá un día tranquilo.

O al menos eso le quedaba claro con lo que le había pasado en la prueba del último experimento.. donde, había perdido la mayoría de su ADN, ahora siendo más un.. o una Loud.

Sería completamente honesto.. tenía un montón de sensaciones extrañas recorriéndole todo el cuerpo, aunque en estos momentos no es como si pudiera hacer mucho para resolver aquello, ya que.. bueno, no era cómo las otras veces donde cambió de cuerpo, era su cuerpo. Pero.. moldeado para parecerse a Luna Loud, desde sus atributos físicos hasta sus rasgos faciales, siendo la única excepción de que tenía el cabello largo, que le llegaba hasta la espalda, fuera de eso.. quién sea que lo viera.. pensaría que es ella.

Sabiendo de antemano que sería bastante incómodo encontrarse con una situación así, por lo que de verdad esperaba que no tuviera qué hablar con otras personas, simplemente.. no cree que pueda fingir ser ella muy bien.

Laboratorio de Lisa










Sus mejillas estaban completamente rojas, cerrando los ojos por la vergüenza que estaba sintiendo en estos momentos, ¿La razón?, solo de pensarlo se avergonzaba más, pero aquí va.. la señorita.. o más bien, Luna, se encontraba manoseando sus glúteos, apretándolos. Lisa se había ido a otra sección de su laboratorio para revisar si tenía lo necesario para reparar los brazaletes, y.. los había dejado solos tanto a... él como a Luna, por lo que era muy obvio que la mujer no iba a desperdiciar nada de tiempo, y empezó a darle una ojeada muy "discreta" según sus palabras.

No podía hacer mucho ya que se sentía muy incómodo.. incomoda, honestamente eso era una de las cosas que aún no tenía claro, pero.. en sus pensamientos seguiría viéndose así mismo como un hombre, aún si no lo era.

- Solo mira el tamaño de este trasero.. es una lástima que lo haya perdido.. pero al menos puedo manosearte todo lo que quiera..~, así que ni se te ocurra decirle a Lisa, ya tengo suficiente con el hecho de haber roto algo de ella.—Su hermana no era de las que perdonaba fácilmente, por lo que.. si este favor fue gratis, quizás ya no lo era debido a lo que hizo... aún así, seguiría manoseando a "Joseph" agachándose para así frotar su cara en sus nalgas.

- D-Déjeme en paz por favor.. esto es sumamente incómodo.. s-se supone que es una mujer adulta.. actúe cómo tal, solo porque me veo cómo usted no le da derecho de hacer todo esto.. ¡Y dejé de frotar su cara ahí!, ¿A-Acaso no tiene vergüenza..?—Decía con sus mejillas completamente rojas, ya que se sentía demasiado incómodo, escuchando como su contraria solo se reía, viendo cómo alejaba su cara de sus glúteos, suspirando con tranquilidad, a lo que luego sentía un dolor repentino.

- ¡Wow!, no sé qué es pero cada nalgada que te doy se siente mejor que la anterior, y.. bueno, creo que puedo hacer todo lo que quiera.. eh, "Luna", por ahora tú eres la famosa Luna Loud y yo soy un jovencito que está teniendo suerte contigo~—Se mordía el labio al verla de arriba a abajo, si no tuviera como prioridad ir con Sam, daba por hecho que le daría un buen y enorme recorrido a su "contraria", aunque.. por ahora quería vestir algo más acorde a su cuerpo actual.

Ya que.. bueno, solo digamos que ya no le lucían muy bien los jeans que llevaba puestos, y... sería emocionante el cambiar de estilo.

- N-No, por más que me vea diferente sigo siendo el mismo de siempre.. y lo mismo aplica contigo.. solo porque te veas como yo no quiere decir que puedes tomar mi estatus de persona joven para hacer todo lo que te plazca..—Aún se sentía muy avergonzado por todo lo que estaba pasando, subiéndose los bóxers que aún le quedaban, intentando ignorar el hecho de no tener nada entre las piernas, esperando que su camiseta no se rompiera.

Causas científicas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora