Proyecto «Conociendo a Yavé».
Básicamente, el análisis bíblico de una criticona que terminó siendo Ovejhacendosa. Mis primeros pasos, pensamientos que pueden o no cambiar con el paso del tiempo.
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6 de diciembre del año 2022
¿Qué fue primero? ¿La sabiduría o la inteligencia?
De acuerdo, ambas son importantes, pero... si dijéramos que una engendra a la otra..., ¿cuál de las dos sería el origen?
Salomón dijo en esta parte de sus proverbios que su padre, David, le dijo que la sabiduría era primero. Con lo que obtienes de la sabiduría, puedes obtener inteligencia.
Si me detengo a pensarlo, tiene sentido. La inteligencia es mental y, hasta cierto punto, instintiva. La sabiduría es espiritual y, hasta cierto punto, emocional y mental. El fruto de la inteligencia es la estrategia y el fruto de la sabiduría, la integridad. Con integridad puedes cultivar inteligencia, pero con estrategia sola no puedes cultivar sabiduría.
¿Por qué?
Porque la sabiduría requiere de cierto componente emocional que quien se enfoca en la mente suele pasar por alto. La sabiduría comprende que no todo se trata de resultados.
Pero la sabiduría te da integridad. Es decir, nobleza, perseverancia, honestidad, principios, valores, responsabilidad, diligencia y todo lo que la integridad engloba. ¿Puedes obtener inteligencia con esto? Yo creo que sí. La sabiduría te da las herramientas necesarias para trabajar tu inteligencia.
Sigo pensando que ni la sabiduría ni la inteligencia son más importantes que la otra, pero tal vez... La sabiduría sea la madre. ¿Qué vendría a ser una inteligencia que no nació de la sabiduría?
Miremos (pero miremos de verdad) a nuestro alrededor, examinemos la historia universal... y hallaremos la respuesta.
