El divorcio es algo difícil para toda familia, sin embargo, lo es aún peor para quienes tienen hijos. Im Nayeon y Yoo Jeongyeon fueron un feliz matrimonio durante seis años, hasta que, después de momentos sumamente tensos entre ambas, llevaron al di...
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YOO JEONGYEON'S POV:
Han pasado dos meses desde que el accidente ocurrió; Nayeon ha mostrado avances, han sido pequeños, pero al menos los ha tenido. Suelen ser los mismos movimientos que realizó la primera vez, aunque ahora los demuestra con mayor frecuencia. Las heridas en su cuerpo se han transformado en cicatrices, algunas con mejor sanación que otras, pero ninguna abierta. Hace un par de días le han quitado el tubo de oxigenación, ya que ahora es capaz de respirar por sí misma. Me tranquiliza saber que se ha ido recuperando bien, al menos en lo externo; ya que había bastante peligro con aquella vena que se rompió.
Por todo lo que tenemos a nuestro favor; puede que despierte pronto. Aunque no me atrevo a ilusionarme con ello.
Por otro lado, Ryujin ha comenzado a caminar. Sus tratamientos con un especialista son diarios desde hace dos meses; ella se esfuerza mucho, y suele invitar a sus amigas a realizar sus ejercicios junto a ella. Últimamente, la falta de tener a sus dos madres le ha afectado bastante; ya que, al fin podía decir que estábamos todas juntas como familia, pero eso se le ha sido arrebatado por algo que no estuvo en nuestras manos. Me vi en la obligación de llevarla a ver a Nayeon bastantes veces, porque me di cuenta de que su recuperación podría tardar más de lo esperado, y no puedo permitir que mi hija pase tanto tiempo sin ver a su madre.
Al principio fue aterrador, porque no sabía cómo Ryujin reaccionaría al estado de Nayeon. Cuando estuvimos junto a ella; lloró, y trató de subirse a la cama para poder abrazarla, pero por desgracia, tuve que evitar que lo hiciera. La tristeza la golpeó con rapidez, pero me alivió el hecho de que no sintiese culpa. Ryujin simplemente está muy agradecida con Nayeon por protegerla, tanto así que cada paso que puede dar se lo dedica. Ha hecho múltiples dibujos sobre nuestra familia, por supuesto, siempre incluyendo a su gato. Ha sido triste que no pueda verlo durante todo este tiempo; Zanahoria ha actuando de forma intensa estos últimos días, siendo posesivo cuando los perros de Tzuyu buscan acercarse a ella.
En este instante me encuentro junto a Jihyo, mi mejor amiga tiene nuevas noticias sobre el caso del accidente, y por lo que me ha contado, ha logrado avanzar bien, tanto de manera individual, como colectiva con el resto de abogados que han sido contratados por los demás afectados del accidente. En conjunto, ellos han logrado ganar los últimos dos juicios; por lo que se espera poder tener una conclusión ahora, o en caso de que el juez crea necesario, entonces deberán esperar a que Nayeon tenga la posibilidad de dar su testimonio también; así como Ryujinnie debe darlo.
Ella ha estado reacia a hablar demás sobre el accidente, tan solo cuenta lo que sucedió antes y cuando los paramédicos ya estaban atendiéndola; no recuerda con exactitud cómo fue que ocurrió, y tampoco le gusta cuando en las sesiones psicológicas tratan de volver a ello. Así que la tarea de Jihyo se ha complicado un poco.
— Si no es Ryujin, la psicóloga puede aportar en el caso —comenta mi amiga, tomando el último sorbo de su café.
— Es una buena opción, pero de todas formas deberías preguntarle a Ryujinnie si está de acuerdo.
