El divorcio es algo difícil para toda familia, sin embargo, lo es aún peor para quienes tienen hijos. Im Nayeon y Yoo Jeongyeon fueron un feliz matrimonio durante seis años, hasta que, después de momentos sumamente tensos entre ambas, llevaron al di...
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IM NAYEON'S POV:
A Ryujinnie y a mí nos negaron el ser trasladadas a una misma habitación, pese a que Jeongyeon les haya pedido expresamente con varias razones a su favor. Al parecer, fuimos demasiado optimistas al creer que podríamos lograr hacerlo. De todas formas, al parecer eso ha sido un impulso para mi pequeña y para mí, ya que nuestro tratamiento para volver a caminar ha ido más rápido de lo que se esperaba; ninguna quería seguir retrasándose demasiado, lo que más deseamos es volver a casa lo antes posible. Mi bebé hoy estará en su último día con la terapia física, la cual servirá para evaluar si finalmente será dada de alta o tendrá que seguir tomándola.
Me siento muy orgullosa de decir que mi pequeña ya camina sin mayor dificultad, no necesita de ningún apoyo, e incluso ha recuperado su velocidad normal. Lo único que aún se le limita es el correr, pero dentro de un tiempo ya debería ser capaz de hacerlo sin ningún tipo de restricción.
Por otro lado, yo también he comenzado con leves caminatas, son exhaustivas para mí que pasé tanto tiempo en esta cama, pero al menos puedo ir hasta el baño sin necesidad de vigilancia. Cuando me canso demasiado o ya he hecho todos mis pasos diarios, debo volver a la silla, para no sobrecargar mi cuerpo y obtener un efecto no deseado. Mis brazos también han recuperado fuerza, la suficiente como para tomar tres kilos estando de pie.
Lo cual significa que ya estaría calificada para cargar a mi bebé... Más o menos.
Hoy ya he finalizado la caminata del día, y como ha sido la primera vez que paso más de treinta minutos caminando sin mayor descanso, mis piernas han quedado cansadas, pero yo muy feliz de haber podido lograrlo. Jeongyeon me lleva con la silla hasta la habitación de nuestra hija, ya que Mina quería hablar con nosotras sobre algo importante al respecto de nuestra pequeña.
Al llegar a la habitación, mi pequeña se encuentra fuera de su cama, jugando con Chaeryeong y siendo vigiladas por Mina. Todavía recuerdo el momento exacto en el que Jeongyeon me comentó que Ryujin quería casarse con su mejor amiga... Honestamente, si eso llega a suceder en un futuro, me felicitaré a mí misma por haber logrado que mi crianza llegue a ese nivel de éxito. Que mi hija se case con una persona con quien es tan cercana me gustaría mucho, la confianza en una relación así estaría a otro nivel. De todas formas, mientras ella sea feliz con la compañía de alguien, yo estaré feliz de poder presenciarlo; aún está tan pequeña que no quiero pensar demasiado en ese tipo de cosas, disfrutar de su infancia ahora es algo en lo que suelo concentrarme mucho.
— ¡Mamás, llegaron! —exclama mi bebé, corriendo para poder abrazarme, y luego dejar un beso en la mejilla de Jeongyeon—. Chaeryeong vino a verme.
Ambas saludamos a la pequeña, que con emoción nos da un corto abrazo a cada una, para luego ir hasta su madre y quedarse junto a ella.
— Bebé, recuerda que no debes correr —le recuerdo a mi hija; ella me mira con neutralidad, pestañeando con rapidez y finalmente dándose la vuelta—. Yoo Ryujin, no me ignores.
