Epílogo💖🔥

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—¿Estás nervioso?

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—¿Estás nervioso?

—No.

—Sí, lo estás.

—¿Y si él quiere que me acueste con él?

—No te pediría algo así, a menos que él quiera compartir a su sumiso.

Felipe se preguntó cuando aceptó entrar en un juego prohibido, y, al mismo tiempo, desconocido para él.

«Ian Callum»

Eric le había relatado de manera pormenorizada su vida, sus excesos, todo lo que involucraba a un clan poderoso que estaba acostumbrado a aplastar a cualquiera que se interpusiera en su camino.

—El tipo no me pareció así. Solo arrogante.

—Ian es diferente. Están los Callums que asesinan y destruyen, y luego los que asesinan y se enamoran. Él pertenece al segundo grupo.

Felipe iba del brazo con su esposo.

«Dom».

Cierto, se acostumbraría alguna vez a usar esa palabra. Se le escapó una risilla de los nervios. Eric volteó hacia él y sonrió.

—¿Estás bien, cosita?

—Sí, maestro—dijo con una gran sonrisa y sus ojos pícaros detrás de un antifaz de color negro y lentejuelas doradas.

—¿Te han dicho que eres un provocador?

—Solo para ti—expresó y Eric se detuvo en el pasillo para darle un beso antes de ingresar.

—Vamos a entrar. Jugamos si te interesa, y si no, nos vamos ¿De acuerdo?

Felipe asintió. Estaba muy seguro de su dom, él nunca le haría daño o permitiría que alguien se lo hiciera. Puede que el tal Ian gozara de fama de asesino guapo entrenado, pero su hombre no se quedaba atrás.

Felipe se había excitado solo una vez viendo videos porno. El protagonista había sido su esposo. Un video de casi un minuto en donde se masturbaba en una tina y se enfocaba directamente a la cámara. Felipe quiso ser la cámara, bueno, también deseó convertirse en la mano, la tina, el agua y todo lo que rodeaba a ese dios lujurioso.

—El próximo viernes daremos una sesión aquí. Están invitados.

—¿En ese escenario?

—No, existen otras opciones además de este lugar. A nosotros nos gustan las cosas un poco más...privadas.

Radil, el anfitrión les había explicado cómo funcionaba ese club en donde su amigo Ander solía pasar los viernes. El antro que daba a la fachada era solo una pantomima, la verdadera acción ocurría puertas adentro, en el subsuelo de un sitio que derrochaba glamour en mobiliario antiguo.

Match point - Bilogía Match point Libro 2 (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora