Capítulo 52: La Estrella del Infierno

6 2 0
                                    

En el anillo del orgullo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

En el anillo del orgullo

Pasaron semanas y Mariel ya se había convertido en la estrella de porno más codiciada del inframundo. Con su lencería negra y provocativa, Mariel se destacaba entre todos los talentos que Valentino había tenido. Cada aparición, cada susurro y cada movimiento de Mariel le aseguraban a Valentino ganancias astronómicas, mucho más de lo que jamás había conseguido con Angel Dust.

En este momento, Valentino estaba rentando a Mariel en su antro, un lugar lleno de demonios ansiosos por ver y participar en sus espectáculos. La música pulsaba a través de las paredes, y las luces intermitentes añadían un aire de decadencia a la escena. Mariel, vestido con su lencería negra, caminaba entre la multitud, sus orejas de lobo agachadas en sumisión mientras Valentino lo guiaba por el antro.

Valentino se detuvo en una esquina oscura, donde varios demonios esperaban ansiosos. "Aquí está la joya de la noche, caballeros," dijo Valentino con una sonrisa posesiva. "Mariel, muestra lo que sabes hacer."

Mariel tragó saliva y asintió, sabiendo que no tenía opción. Con cada actuación, buscaba dentro de sí mismo la fuerza para seguir adelante. Los demonios se abalanzaron sobre él, sus manos recorriendo su cuerpo mientras Mariel intentaba mantener la compostura.

Uno de los demonios, un ser alto y de mirada oscura, se acercó a Valentino. "Este chico es impresionante. ¿Lo rentas por la noche completa?"

Valentino sonrió, satisfecho con la admiración en los ojos del demonio. "Depende de cuánto estés dispuesto a pagar. Mariel no es barato, pero te aseguro que vale cada centavo."

Mariel escuchaba la conversación mientras sus manos temblaban ligeramente. Cada vez que era alquilado, se recordaba a sí mismo por qué lo hacía. Su tía Angel Dust, su promesa de protegerla y liberarla de Valentino, era lo único que le daba fuerzas para seguir.

Después de un rato, Valentino llevó a Mariel al estudio para grabar más películas. Las cámaras estaban listas, y el set preparado. Valentino se acercó a Mariel, ajustando la lencería negra y provocativa que debía usar. "Recuerda, Mariel, eres mi estrella. Quiero que brilles más que nunca hoy."

Mariel asintió, su mente enfocada en la tarea. Mientras las cámaras comenzaban a rodar, se sumergió en su papel, dejando que su cuerpo se moviera al ritmo que Valentino deseaba. Sabía que no podía fallar. No ahora.

Más tarde, después de la filmación, regresaron al edificio de los Vees. Valentino estaba ansioso por disfrutar de Mariel en la intimidad de su suite. Cerró la puerta detrás de ellos y se acercó a Mariel, quien estaba sentado en la cama, todavía vestido con la lencería.

Valentino lo miró con una mezcla de posesión y deseo. "Mariel, hoy has superado mis expectativas. Cada día te vuelves mejor y más valioso para mí."

Mariel forzó una sonrisa, sabiendo que no podía mostrar sus verdaderos sentimientos. "Gracias, Valentino. Haré lo que sea necesario para complacerte."

MI PEQUEÑO ANGELITO-  ENTRE ENGAÑOS Y  TRAICIONES Donde viven las historias. Descúbrelo ahora