¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
⋆˙⟡☾𖤓☽ ⟡˙⋆
CARLOS BAJO DE LA LIMUSINA, seguido por Jay y Lonnie, la cual había insistido en que la llevaran con ellos.
-Oh, déjame ver.- Pidió Mal, al ver la copia de la varita que Carlos llevaba en sus manos. -Wow, que belleza.- Dijo mientras la sostenía.
-Son las doce.- Mencionó Jay, recordándoles a lo que vinieron.
-Okay, chicos. Nos dividiremos. Carlos, Evie. Iran con Archie al Castillo de Chernabog.- Dijo Mal, viendo como ambos asentían. -Lonnie, Jay, y yo, iremos a destacar a Ben. Nos reuniremos aquí mismo antes de irnos.- Dijo con seriedad. -¿Estamos listos?
-Sí.- Afirmó Evie.
-Llegó la hora.- Dijo Mal, antes de que los grupos se separaran.
Mientras los tres chicos caminaban hacia el castillo, Archie les explicaba el plan que tenía. Siendo sorprendidos al ver como una mujer se interponía en su camino.
-Ahí están.- Murmuró madre Gothel al verlos, lanzándoles un par de capas para que se cubrieran. -Vamos, no tenemos mucho tiempo.- Dijo, guiando a los demás chicos al castillo en ruinas.
Al llegar, los cuatro fueron recibidos por dos guardias que se encontraban en las afueras de este.
-¿Quién es usted?- Preguntó uno de los guardias en un tono serio.
-Gothel, cariño. Vengo a ver a mi amigo, Chernabog.
-El amo no recibe a nadie en su castillo- Contestó el otro guardia antes de ser interrumpido.
-¡Pena! ¡Pánico! ¿Quién está ahí?- Preguntó Chernabog molesto desde el balcón.
-¡Es Gothel, amo!- Contestó Pánico con notables nervios.
-Y ¿Quienes son esos de ahí?- Preguntó el mayor, aún desde las alturas.
-Mis guardaespaldas.- Afirmó Gothel, viendo como Chernabog la veía con sospecha. -¿Qué? No eres el único con poder en esta isla, querido.- Afirmó.
-Déjenlos pasar.- Ordenó, haciendo que ambos guardias abrieran las puertas del castillo.
-¿Qué ellos no trabajan para Hades?- Le preguntó Archie a su madre.
-Se aburrieron de cómo los trataba, y se fueron con alguien aún peor.- Contestó Gothel, viendo como Chernabog bajaba a recibirla.
-¿Qué es lo que quieres?- Preguntó.
-¿No hay un hola? ¿Cómo estás?- Preguntó Madre Gothel sin recibir ninguna respuesta.
Su mirada era fría y calculadora, mientras observaba a Madre Gothel, quien se mantenía erguida frente a él, su rostro mostrando confianza y picardía, algo típico en ella.
