Capítulo 37
PEYTON. 2016
¿Qué había sucedido después de ese brindis?
Recapitulemos.
Oh, estuvo bueno, lo juro. No quieren perderse de esto.
Al final Chloe nos convenció por un juego de beer pong. Jugamos la primera ronda entre Chloe, Shane, Louis y yo. Resulto que Louis era un gran jugador pero Shane era mejor y perdimos la primera ronda. Louis y Shane continuaron matando en beer pong durante 3 rondas más, mientras los chicos y yo platicábamos y seguíamos tomando cerveza.
—Los chicos están aniquilando esta noche —dijo Marcie con una sonrisa.
—Son jodidamente buenos, deberíamos estar haciendo dinero de esto —analizo Chloe.
Me reí. Ellas me agradaban y además debíamos de sumarle que Marcie odiaba a Madison tanto como yo. Ron mantenía su mano sobre mi cintura y yo me mantenía roja por la cercanía. La fiesta seguía siendo animada y todos aun esperábamos por los fuegos artificiales. No faltaba mucho y los rumores iniciaban a correr.
—¿Estas emocionada? —me pregunto Ron jalándome un poco más hacia él.
Y no solo por los fuegos artificiales. Estaba con él, en una fiesta, con lo que podía llamar amigos. No quería pensar en la situación con mi padre, tan solo iba a disfrutar de nuestros momentos juntos.
—Sí, mucho.
—5 juegos seguidos, perras. Eso tiene que ser un maldito record —Chloe estaba poniendo las manos en alto con el signo de cuernos.
—Los fuegos están a punto de iniciar —se emocionó Marcie.
—¿Estas lista para otra primera vez, Peyton? —su voz atravesó mi oído y dejo correr una corriente eléctrica por todo mi cuerpo.
—¿Debería?
—Tal vez. Ven conmigo, están a punto de empezar.
De la mano de Ron nos fuimos lejos de los chicos sin decir nada. Regresábamos por el camino que tome con Chloe para llegar a la fiesta. Ya estaba oscuro y apenas se podía ver bien, además estaba nerviosa porque no sabía que es lo que iba a suceder. Adoraba eso de las primeras veces, le quería dar todas las posibles. Pero entonces algo se interpuso en nuestro camino.
—¿A dónde creen que van? Los fuegos artificiales están a punto de iniciar.
Madison. ¿Cómo sabía que estábamos aquí? ¿Nos estaba espiando?
—Muévete, Madison —dijo Ronald en tono cansado.
Ella se cruzó de brazos y me volteo a ver.
—¿Vas a llevarla a tu lugar especial, Ron? Ese en donde tuvimos sexo —levanto las cejas.
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WHISPERS: Mi Hermanastro
RomancePronto te vas a enamorar del mágico pueblo de Whispers y sus maravillosas historias de amor. ¿Qué hace la hija de una mujer en rehabilitación cuando no tiene a dónde ir? Busca al padre que no ha visto en años y que tiene dinero de sobra para manten...