Capítulo 9
PEYTON. 2018
Eso no fue lo peor que ha pasado en una de las tantas fiestas de Ronald Davis pero esa fue la primera que me paso a mí. Es por eso que temo a la fiesta de esta noche, no quiero terminar ebria y hacer una escena. Harry fue a jugar baloncesto con su primo luego de llevarme por un helado y me quede en casa, sin Chloe aquí no hay mucho que hacer. Después de 2 años aún sigo sin tener amigos y papá no me dejo conseguir un empleo de verano este año por lo tanto no tengo mucho que hacer, quizás puedo inscribirme a un curso o algo por el estilo. Debí ir a México con Chlo. Hmm, a lo mejor abro una red social.
—Adiós, amorcito —escucho decir a Amber y lanzar un beso—, regreso en un rato.
—Bye-bye, linda —dice Ron.
Tengo una revista en mi mano y hago como que presto atención a la página con un modelo rubio, con una pose sensual y la playa de fondo. La puerta se cierra y Ron aplaude una vez antes de lanzarse al sillón. Lo veo por encima de la revista, se está agarrando el cabello lacio, tiene esa sonrisa encantadora que sabe tiene y sus ojos están encontrando los míos.
—Así que... —parece pensar sus palabras—. ¿Cuál fue la última vez? ¿Cuándo saque la mierda fuera de Max? O ¿Cuándo termine con esa rica que vive a unas cuadras de aquí?
El recuerdo que está viviendo se puede oler desde donde estoy sentada. Recuerdo ambas como si hubieran sido ayer más que una pero sé que sucedió en ambas. También parece que no está molesto conmigo. Claro que después de lo sucedido y el acontecimiento que es prohibido de hablar, Ron está bien con todos sus viejos amigos.
—No, la vez que terminaste con la rica fue después de que le sacaras la... mierda... ¿Te acuerdas de eso?
Mi corazón late más rápido, puedo escucharlo y siento que él también puede, eso esta tan cerca del día del accidente. ¿Qué es lo que sabe Ron?
—Supongo, solo vino a mi cabeza cuando hiciste el comentario —contesta.
Esta acostado en el sillón más chico que está enfrente de mí, se le nota tan despreocupado. Quisiera contarle todo, decirle lo que siento, además está para comerse con esos vaqueros. Se ve tan 2016, solo quiero regresar el tiempo.
—Pero tú lo recuerdas todo. ¿Puedes tan solo decirme? A veces sé cosas que supuestamente no debería, es tan complicado platicar de pasadas experiencias cuando perdí todos mis recuerdos de cuando era rebelde y alocado.
Como si fuera tan fácil. El Ronald rebelde y alocado es el que menos me agrada.
—Tal vez lleguen solos, no quieres conocerte a través de otras personas. Todos piensan distinto y te vemos con diferentes ojos.
—Por favor, Peyton. Necesito ayuda, sé que era feliz —se para para hincarse frente a mí—, había alguien, ¿cierto?
Dejo la revista a un lado y me pongo de pie sin mirarlo antes de caer en el chantaje de sus hermosos ojos cafés y en la invitación de sus encantos. ¿Quién soy yo para decirle su vida? Yo también tengo mis propias cicatrices de ese día, yo también sufrí.
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WHISPERS: Mi Hermanastro
RomancePronto te vas a enamorar del mágico pueblo de Whispers y sus maravillosas historias de amor. ¿Qué hace la hija de una mujer en rehabilitación cuando no tiene a dónde ir? Busca al padre que no ha visto en años y que tiene dinero de sobra para manten...