Vincent.
El veredicto no fue precisamente lo que esperé.
Flashback
— El jurado aquí presente encuentra al acusado Vincent D'Angelo inocente por el delito de homicidio a Yuver Isaac.
—De igual manera, inocente del delito de malversación de fondos.
—Sin embargo se le declara, culpable por el delito de obstrucción a la justicia y cómplice en el caso del expediente Vieri. Dándole la privación de libertad por cuatro años, sin derecho a Fianza.
Fin del Flashback.
Había pasado un año pero mi memoria lo transmitía en imágenes como si se tratara de una película vista ayer mismo. Después del juicio le agradecí por su magnífico trabajo a Ana. Aunque no quedé totalmente libre, de 30 años a 4, es una buenísima estratega.
No resentía nada con Andrés, trabajamos juntos. Sabía de sobra las consecuencias. El me ha salvado muchas veces antes.
Caminé por los oscuros pasillos de la cárcel para la sala común. Sentía que las paredes se hacían más chiquitas y en algún momento me iban a aplastar.
Me senté en la sala frente al único televisor que teníamos. Me encargaba de andar solo y alejado de cualquier problema. Ya me bastaba mi inútil existencia.
Me dediqué a mirar las sillas. O a la nada en cuestión.
Prendieron el televisor en el canal de noticias:
—Nos encontramos aquí. Frente al al restaurante "Don Antonio" —mi vista inevitablemente miró al televisor. A la reportera.—Acaba de ganar una Estrella Michelin Y muy merecido. Cómo observan está llenísimo . Vamos a ver si la Chef y dueña nos puede decir unas palabras.
La reportera caminó entre los comensales y llegó con Bianca.
Mi corazón se aceleró de tal manera que sentí los latidos de él en mis tímpanos.Llevaba el pelo un poco más corto. Si rostro más cansado pero igual de bella.
—Buenas noches querida. Háblame. Toda la audiencia quiere escucharte —dijo la reportera sacándole una risa a Binaca.
Sin importar que esa no le llegara a los ojos, quería ser yo quien le causara las risas y estar a su lado.
La agonía apretó mi pecho, machacando mi garganta.—No soy de muchas palabras. Ha sido un año muy duro. Muchos sacrificios en todos los sentidos de mi vida, pero esta recompensa es la más bonita. Aquí los espero para que disfruten de nuestra comida —hizo un gesto divertido.
—¿Quién te acompaña hoy?
Esa fue una daga en el lado izquierdo de mi pecho.
—Ellos —señaló y la cámara los enfocó.
Rita cargaba a Val. Mis puños se apretaron tanto que mis nudillos estaban completamente blancos. Me mordí la mano en busca de control para todas las emociones que se arremolinaban dentro.
Mi hija estaba tan grande, muy grande Lara sus dos añitos. Vestía un vestido amarillo con margaritas de adornos. Tenía un cerquillo y si pelo negro caía por su espalda. Saludaba a la cámara riéndose y tirando besitos.
Quería cerrar los ojos para que las lágrimas encontraran su camino de regreso pero no quería perderme ni un detalle. Seguía mordiendo mi mano y salió sangre.
Óscar cargaba a Junior. Vestido con un short negro y camisa azul. Su pelo largo azabache le llegaba a las orejitas. Él no quería mirar a la cámara así que se escondió en el cuello de Óscar.
Ojalá se escondiera en mi cuello. Ojalá ser yo quien lo cargara.
Graciela se abrazaba a Óscar. Tenía su panza a reventar por el embarazo. Gonzalo me informó que están a la espera de su primogénito, su niño que llevará por nombre Gael.
Estaba muy orgullosa de ella.
Verla me tenía sin aliento, con el corazón en un puño. No puedo creer todas las cosas que me perdí y en todas las primeras veces de mis hijos de las que no soy testigo.Sus palabras. Pasos. Bajé la cabeza hasta tener mis ojos contra mis puños. Mis nudillos chocando con mi frente.
—D'Angelo, tú vista llegó.
Me limpié la cara con las palmas y salí guiado por el guardia a las sala de visita, recibido por Gonzalo.
—Hombre —me saludó con una palmadita y soltando en mi camisa disimuladamente algo de dinero.
Me iba a hacer falta.—Dame la situación general —pedí.
—La empresa va bien. Con poder femenino. Tú vicepresidenta y la relacionista pública hacen un trabajo estupendo. Bianca... Bianca le va bien en el restaurante, tan bien que hoy recibe un premio. Se mantiene a ella y a los niños. No acepta el dinero que le dan de la empresa.
Mi mujer es terca.
—Igual deberías aceptar verla.
—No —rugí—. Te parece que ella merece un hombre en esta mierda —dije dolido arrancándome el alma en vida cada vez que decido no verla.
Pero es por su bien. Ella no tiene que cargar con esto.—Lo de. Pero es tu esposa, la mamá de tus hijos y quiere verte.
—Ya dije que NO. —le grité
—Como digas.
—Lo siento. La situación me supera —reflexioné—. Mejor dime, ¿qué saben los niños? —pregunté con miedo.
—Bianca y todos les hemos dicho que estás arreglando unas decisiones que se tomaron mal en tu trabajo y que te llevará un volver.
Bien. Podía trabajar con eso. Solté el aire.
—Es la mejor. Supo como contar la situación —dije triste refiriéndome a Bianca.
—Deberías ir a la enfermería a que te revisen eso —señaló con la cabeza mi mano ensangrentada por la mordida.
—No es nada —desestimé —. Ni me duele.
En mis circunstancias habían cosas peores.
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Amor Agridulce
RomanceElla es todo lo dulce que podrás encontrar. A él muchos lo definen como amargado Ella ve el vaso medio lleno.Él medio vacío. Aunque el lado pacífico de Bianca siempre sale a la luz , va a ser el terremoto que hará temblar , desmoronar y ayudará a...