Alexa & La Ciudad de los Sueños

SEGUNDA PARTE/ Capítulo 20

Las niñas.

Ciudad de los sueños
Un mes después volví a ver a las niñas con cierto parecido a Hortensia y a Elizabeth, ambas estuvieron en mi mente por mucho tiempo incluso las busqué pero nunca las encontré hasta ahora que estaban en frente del "café helado" . Las niñas miraban a través de la ventana de vidrio el interior de la tienda en donde se veía a personas desayunar.

-Hola-Saludé con una sonrisa. Ambas me miraron como si me reconocieran.

-Me alegra volver a verlas-Dije-.Por cierto cómo se llaman- Pregunté al mirarlas. Ambas no dijeron nada.

- Acabo de comprarme este pastel-Dije al señalar el pastel de fresas que tenía en mi mano-. Me acompañarían a comerla -Invité.

Ambas asintieron.
-¡Geníal! -Expresé contenta. Luego mi estado de ánimo disminuyó cuando mi mirada se cruzó con la figura de una mujer de ojos y cabello gris, era la misma señora que la última vez llevó a las niñas tan bruscamente, enseguida caminó apresurada en mi dirección.

¿Acaso venía para llevarse a las niñas?.

Dentro de mi hubo algo que no quería ver a las niñas llevadas por esa señora vieja por eso agarré las manos de ambas niñas y les pedí que me siguieran ambas no dijeron nada tampoco se resistieron simplemente vinieron conmigo por la estrecha calle en donde había mucha gente disfrutando algún tipo de fiesta que involucraba muchas linternas que estaban colgadas a lo largo de la calle. Mediante la multitud perdí de vista a la señora vieja. Luego de veinte minutos llegué junto con las niñas en la casa de Quilian.

-¿Las adoptaste? - Fue lo primero que dijo Quilian al verme entrar con las niñas.

-Te lo explicaré todo, solo esperame un ratito-Rogé. Quilian no dijo nada a lo que lo acepté como un "esta bien" así que llevé a las niñas hacía el sofá y les di una cuchara de plástico que encontré encima de una mesita para que lo usaran para servirse del pastel. Luego caminé hacia la cosina junto a Quilian y ahí me encontré con su típica cara seria.

-¿Somos muy jóvenes para ser padres?-Dijo al cruzar sus brazos.

Le expliqué que eran las mismas niñas que había visto hace un mes, las mismas que estaba buscando porque quería ayudarlas y finalmente las encontré y no podía permitir que esa vieja con pinta de bruja se las llevara quien sabe para qué.

-Estas segura que las niñas están desprotegidas-Preguntó.

-Claro por eso están así-Dije, ambos miramos en dirección a las niñas-. Las niñas ni siquiera tienen una ropa decente.
Quilian siguió mirando en silencio en dirección a las niñas mientras yo rogué que comprendiera el hecho de que estaban desprotegidas y que necesitaban ayuda.

-Entonces qué quieres hacer- Dijo al mirarme.

-Deja que se quede con nosostros-Pedí.

Me miró mal

-Ellas no tienen familia-Dije con cara triste.

-¿Te dijeron eso las niñas ?-Dijo.

-No

-Entonces es tu sospecha-Dijo.

-Por favor-Rogué. Mis palabras parecían no ser suficientes por lo que usé el truco de mirarlo con ojos de cachorrito pero él me ignoró evitando mirarme así que puse mi mano en su cara una mano en cada lado y se lo exprimí con fuerza lo hice como una pequeña venganza porque es un incomprensivo

-Te vez tan FEO-Dije y disfruté verlo con la cara aplastada. Seguidamente él sacó mis manos de su cara-. Necesito ayudarlas, después de todo son huérfanas igual que yo-Agregué.

-Bien-Soltó.

-¡GRACIAS!

-Por hoy-Agregó.

-¿Enserio?

-Imagina que sus padres estén preocupados por ellas sin saber en donde están-Dijo.

-Insisto en que están desprotegidas.

-Si es así la cuidaremos pero si no a ti te llevarán el alguacil por secuestrar a las niñas-Dijo.

-No las secuestré-Corregí-.Y nos llevará porque diré que eres cómplice-Agregué y antes de que pudiera responder algo caminé junto a las niñas rápidamente.

Al llegar junto a las niñas las vi comer apresuradas, les aconsejé que comieran más despacio para que no se atragantaran a lo que no me hicieron caso, pocos minutos después ya habían devorado todo el pastel.