|FINAL GIRL!| •Slasher's One Shots•

Patrick Bateman

|NI ROSAS NI JUGUETES|

Con esa carita de galán de feria

Con esas promesas que parecen serias

No te hagas el sordo, escúchame...

-Paulina Rubio

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-Por Dios, Bateman te he dicho que no.- Era la quinta vez en esta semana que el megalómano te invitaba a salir.-Me tienes cansada con tu insistencia.

-Por favor,_________.- Suplicó él, aún con un regalo que probablemente jamás podrías permitirte.- Acepta mi regalo y acepta una cena conmigo.

-He dicho que no.- Nisiquiera volteaste a mirarlo, no querias ver el regalo que posiblemente valga más que todos tus salarios juntos por lo que te quedaba de vida.- No me interesan sus cosas caras ni nada de lo que tenga para ofrecerme.

-Pero...- El ruido del teléfono lo interrumpió.

- Se comunica con ma vicepresidencia de la Oficina de Inverciones Pierce & Pierce, habla con ________ ¿En qué puedo ayudarle?- Bateman se desesperaba cada vez más ante tu negativa.- El señor Bateman esta en su oficina ¿Desea que le pase la llamada?- Un breve silencio inundó la sala.- Ya lo comunico con el señor Bateman.

- Mierda, ________...- Gruñó y entró a su oficina.

Decir que a él le gustabas era un eufemismo, pero tú tenias claro que no sacrificarías tu puesto como su secretaria por algo que probablemente no va a durar mucho tiempo y de lo que te terminarías arrepintiendo en un futuro, además, Patrick siempre consigue a cualquier mujer, tiene a la población femenina norteamerica a sus pies... bueno, la mayoría.

-¡Maldita sea!- Se escuchó desde su oficina, tú reíste burlonamente.- ¡_________!- Gritó, te levantaste y con la misma sonrisa de "come-mierda" lo confrontaste.

-Si, señor Bateman.- Él se levantó de su silla con el ceño fruncido y se dirigió hacia tí.

- ¡Sabes que con ese imbécil no quiero negocios!

-Upsi.- Dijiste irónica.- Lo olvidé señor Bateman, así como usted olvidó que soy su secretaria y no su puta.- Lo viste a los ojos retadoramente.

-¿Disculpa?- Él estaba incrédulo ante tu respuesta.

-Como lo escuchó.

-¡TIENES LA PUTA SUERTE QUE CUALQUIER MUJER QUISIERA! TENERME A SUS PIES.- Gritó, pero tú no retrocedías.- Y ASÍ ES COMO ME PAGAS ¡ESTAS DESPEDIDA!- Tú fingiste sorpresa, no era la primera vez que él te "despedía" así que te limitaste a "sorprenderte", al final siempre llamaba a tu apartamento y te pedía regresar.

-Oh... esta bien, señor Bateman.- Dijiste cabizbaja pensando "Bien, salí temprano, debería ir a ver una película".-

Tomáste tu bolso y entraste al ascensor, mientras que Bateman estaba hecho furia, se sirvió una copa de whisky y empezó a calmarse y ante esto cayó en cuenta de su error: Te despidió ¿Qué haría sin tí? Por tí se arreglaba, por tí se levantaba y tenía ánimos para ir a la oficina, tenía que arreglarlo.

Tú ibas caminando, ya eran casi las 7:00 pm y tus tacones resonaban por la calle solitaria.

-Hola muñeca.- Dijo un tipo apareciendo desde un callejón.- ¿No quieres que te arranque esa faldita?- Él se empezó a acercar a tí y tu primer impulso fue correr, pero él te tomó del antebrazo y te estampó en la pared, más tipos emepezaron a aparecer alrededor tuyo, en concreto dos más...

-Por favor, no...- Las lágrimas se acumularon en tus ojos.

-Shh, no llores muñequita.- Aquel tipo limpió tus lágrimas con sus pulgares y se acercó más a tí, tú cerraste tus ojos esperando lo peor.

...

-Ya debería haber llegado a su casa...- Balbuceaba Bateman.- Voy a buscarla.- Iba decidido y tomó la ruta que te había visto coger mientras te acosaba, pasaba por un callejón y escuchó tu voz.

-¡Basta, por favor!- Él bajó de su Mercedez y fue corriendo hacia el lugar, sacó su arma y le disparó a dos de los tipos y el que estaba encima tuyo lo confrontó, así empezó una pelea entre quién tenía más fuerza, claramente, un delincuente común no era rival para el megalómano Patrick Bateman.

Te tiráste a abrazarlo mientras temblabas y llorabas, él se limitó a acariciar tu cabello y subirte a su auto para llevarte a tu apartamento.

-Gracias...- Dijiste al fin, cuando ya estabas en el sofá de tu hogar y aún con el saco de él en tus hombros.

- No es nada, por tí me hubiera enfrentado a veinte de esos debiluchos.- Alardeó y sonreíste un poco, él te dió un vaso con agua.

-No tengo cómo agradecerte.- Suspiraste.

-Puedes empezar por aceptar mis regalos.

-Patrick...

-Y vamos a una cita.- Sugirió.- Por favor, _______ quiero algo contigo.

-No se va a poder eso.- Negaste.- Tú eres tan... Tan tú, tan sofisticado, tan apuesto y con mil mujeres detrás tuyo.- Bajaste la mirada a tu pies.- Cuando te aburras de mí...- Él te interrumpió.

-Jamás me aburriría de tí.- Se arrodilló frente a tí y tomó tus manos.- Entre esas mil mujeres detrás mío, prefiero a la única que esta frente a mí.- Él unió sus labios con los tuyos en un tierno beso que hizo que no te pudieras negar a él