Is my destiny ✧ KookTae

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Taehyung salió de su trabajo de medio tiempo, había faltado un par de veces debido a los exámenes o eso fue lo que dijo como excusa. Realmente no tenía ganas de trabajar, pero, debía hacerlo para asegurar su futuro en la universidad.

Últimamente había estado divagando mucho, incluso Haerin y Minji lo notaron.

Ya era algo tarde, el autobús iba a tardar, lo sabía, así que decidió llamar a un taxi para que le lleve directo a casa sin hacer paradas.

—¡Taehyung! sabía que te encontraría por aquí —Una voz agitada llamó su atención.

Se trataba de Jungkook, sostenía sus rodillas mientras jadeaba por el cansancio.

—¿Qué haces aquí? —Taehyung le cuestionó con el ceño fruncido.

—Quería hablar.

—No tengo nada que hablar contigo —Taehyung se puso a la defensiva.

—Es importante... yo... solo, quiero intentarlo, volver a intentarlo, dame otra oportunidad, Tae —Jungkook dijo con rapidez y se acercó un poco más a él.

—Jungkook... sabes que ya tomé una decisión.

—¿Es de verdad? ¿Lo haces por mi padre o ya no me amas?

Las palabras de Jungkook fueron como una cachetada para Taehyung. Tragó saliva lleno de impotencia porque, lo quería devuelta, jamás lo había dejado de querer, ¿como se le ocurre tan siquiera pensar en eso?

Taehyung bajó la mirada, no sabía que responder, no era como si pudiera decirle que aún lo ama, ¿no?

—Porfavor, Jungkook, ya basta.

—¡No! Todo esto es una estupidez.

Taehyung le miró con pena, realmente si era una estupidez.

¿Debería pedir perdón y arreglar las cosas? Si, probablemente, pero, el taxi que había llamado estaba estacionado frente a él.

Tenía dos opciones: Arreglar todo con Jungkook o subirse al taxi y dejarlo ir de una vez por todas.

—Porfavor, quédate conmigo, no puedo vivir sin ti, mi vida no tiene sentido si no estás en ella —Jungkook trató de evitar que se fuera.

—Taehyung —Agregó, sintiendo demasiado miedo.

El rubio suspiró pesadamente y abrió la puerta del taxi, dejando a Jungkook con la boca abierta.

—No, no, no puedes irte.

Taehyung le dio la dirección al chófer, ignorando las palabras del chico desesperado.

El carro comenzó a moverse y Jungkook también.

Corrió lo más que pudo, persiguiendo al auto, sin importar ser atropellado por no mirar a los lados.

—Ese chico nos está persiguiendo, ¿quiere que pare? —El conductor indicó.

Taehyung miró detrás de su asiento y, en efecto, Jungkook corría hacia el auto son perder la mirada en el.

Taehyung, no sabía que era lo que tenía que hacer, le dolía verlo luchar y correr con tanta desesperación, como si fuera la última vez que le vería.

¿Pero por qué le dijo al señor que condujera más rápido? No tenía sentido.

Le partía el alma verlo así, sus ojos se llenaron de lágrimas al no poder hacer algo. Observó como el chico iba de un lado hacia otro, como si estuviera evitando a los autos qué se interponian en su camino, de verdad deseaba salir del taxi y correr hacia sus brazos y besarle con nunca antes había hecho.