O C H O

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17 de junio del 2020

💚✨Armas para la batalla✨💚

Algo se me ha de ocurrir.
Algo, ¿pero algo qué?
Tiene que ser algo grande, como una sorpresa.
¿Pero, cómo voy a lograrlo?

—Entonces... Yo quería que fuéramos a la cafetería...

—¿¡Pero cómo vamos a ir a la cafete...!? —mi mamá pega el grito en el cielo en cuanto le digo mi idea. La callo con una seña con lo dedo índice sobre mis labios, tratando de que mi papá no escuche nuestra conversación—. ¿Pero cómo le vamos a hacer? ¿Sabes en dónde está?

—Sí, anoche lo engañé para que me enseñara por Maps —. Mamá reniega con gestos, y yo no pierdo la fe—. Solo voy a entregarle su regalo, te juro que no me voy a tardar.

—¿Qué vas a regalarle esta vez?

—Una caja —. Abre los ojos con falsa sorpresa, burlándose de mí—. Sí, sí, ya le regalé muchas cajas, pero esta es diferente. Es la cabeza de su personaje de Minecraft; es un zorro.

—¿Y crees que le guste?

—Espero que sí —. Prendo el celular para mostrarle el personaje que caracteriza a Pablo en nuestros mundos. Ella solo me da una media sonrisa, mirándome con paciencia—. ¿Entonces?

—Está bien —resopla, dándome un abrazo corto—. Pero solo se lo entregas y nos vamos...

—¡Sí, sí! —. Corro a abrazarle y a llenarle el rostro de besos—. ¡Gracias, gracias ma!

—¡Pero no te olvides de seguir estudiando!

—¡Escucho las clases mientras decoro la caja! —. Y sin más, me meto a mi habitación corriendo.

(...)

El cumpleaños de Pablo me está respirando en la nuca, diría Patricia Fernández de Betty La Fea. Las cosas por el virus no han cambiado nada, y nada parece progresar. Pero eso no es impedimento para poder festejar con Pablo uno de los días más importantes para él y para mí. Cada noche parece más tortuosa en la espera eterna, en los días largos sin sus besos ni sus brazos rodeando mi espalda. Cada día se extiende entre deseos de que esto se termine de una vez, y al fin, podamos estar como hacía unos meses en el curso para el examen de admisión.

—Perdón por conectarme tan tarde, Le —me dice Pablo del otro lado de la línea, acomodando su teléfono frente a él—. Tenía que recoger unas cosas.

—¿Unas cosas? —le insisto con curiosidad, él acepta mi jugueteo y sonríe—. ¿Qué cosas trajiste?

—Te tengo una sorpresa, Le. Cierra los ojos —. Con emoción, abro un poco la boca y dejo mi celular recargado en un peluche para poder taparme los ojos. No hago trampa, pues soy fan de las sorpresas. El ruido de una bolsa suena en mis audífonos, y poco a poco se desvanece con la voz de Pablo—: Te dije que te apoyaría en todos tus sueños, y este regalo, es apenas el principio de lo que tengo pensado para ti. Ya puedes abrir los ojos.

Cuando quito mis dedos de los párpados con lentitud, me encuentro con un Pablo sonriente, mostrando un paquete de plumones de cincuenta piezas, el más famoso de las redes. Parece que está en un anuncio publicitario de la marca, pues no deja de sonreír ante mi reacción que se basa en una boca bien abierta con los ojos llorosos.

—He estado ahorrando mucho, Lena. Tengo pensado comprarte más, tanto pueda. No quiero que lo que pasó con Amy te ponga triste, al contrario, quiero que le des batalla, y con esto —. Ahora saca otro paquete de plumones de la misma marca, pero estos tiene glitter en la punta—, podrás darle una lección. Sé que harás maravillas, mi amor. Solo tengo que esperar para verte y darte mis regalos —. Y para terminar la sorpresa, saca otro paquete pero ahora, con metálicos plumones brillando desde otra caja—. Ah, y esto no es todo. Tengo más dinero ahorrado, y pronto te compraré lo que me hace falta...

—Pablo... —. No aguanto el nudo tímido que se formó en mi garganta desde que me destapé los ojos, llorando, escondida en mi almohada—. No tenías que hacerlo...

—Quiero ver feliz a la persona que ha hecho mi vida mejor —. Su frase no me ayuda mucho a mi sesión de llanto, y mi espalda se contrae con los sollozos de emoción—. ¿Te gustaron...?

—¡Sí! ¡Me encantaron! —digo entre llantos sin darle la cara—. Jamás podré regalarte algo igual de especial...

—Créeme que lo único que quiero ahora es abrazarte —. Levanto mi rostro mojado de la almohada que cubre mi llorar, viéndolo con las pupilas brillosas—. Ese es el único regalo que quiero.

💜💚Datos curiosos💜💚

1- Lena tiene una foto de todos los obsequios que Pablo preparó para ella, al igual que en el primer libro, esperaré hasta que ella esté lista para desempolvar recuerdos.

2- Pablo en estos era una maravilla, ¿quién no lo querría de novio?

MoonCat IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora