BOSS
El sonido del teléfono me despertó, después de sonar varias veces en la mesa del velador. Miré en la oscuridad de la noche, de un lado a otro y saqué el arma que traía debajo de la almohada por prevención. Me levanté muy despacio, prendí la luz y giré la cabeza cuando el sonido del teléfono volvió a sonar.
- Hola - dije contestando con duda.
- ¡Boss! - La voz de Noeul se escuchó al otro lado de la llamada, un tanto lejano.
- Noeul
- ¡Boss ayúdame! Acaban de llevarse a mi padre... Boss
- ¡Noeul! ¡Noeul! ¿Dónde estás?!
La llamada se cortó de golpe.
Un mensaje alumbró en la pantalla de mi celular con la dirección de algún lugar al que nunca había ido. Me apresuré a tomar mi ropa, vistiéndome a toda prisa, para salir de casa y manejar en medio de la madrugada.
Cuando llegué al lugar ya había amanecido. Y a lo lejos solo se podía ver un gran edificio en medio de la nada. No se podía ver a ni una sola persona en la entrada y todo el lugar parecía seguro, aunque cuando entré al edificio, una cantidad de armas apuntaron desde varias direcciones por todo mi cuerpo. Las luces rojas me recorrieron el cuerpo desde la cabeza hasta los pies.
¡Mierda!
No podía pensar en ningún movimiento, que no pusiera en riesgo mi vida, pero aún más en la vida de Noeul.
- ¿Quiénes son ustedes?
- Si quieres seguir con vida. baja el arma.
Al principio dude en hacerlo. Apreté con más fuerza el arma en mis manos y la solté casi en un instante cuando un hombre de mediana edad apareció frente a mí.
- Sin preguntas niño. - dijo mirándome con una sonrisa diabólica. Mi mente divago y por un instante creí conocerlo. - Espera. Ya no eres un niño. ¿Pretendes no recordarme o no me recuerdas, Boss?
Más de un recuerdo se apoderó de mi cabeza y comprendí de quien se trataba.
- Prayut... ¡PRAYUT! ¡MALDITO, HIJO DE PERRA!
- EY!! Shhh - dijo con una mirada llena de ira, para luego acercarse peligrosamente, hasta mí y decir: - Sr. Prayut Saensuk ¡SR. SAENSUK! ¡MOCOSO!
- Y una mierda. - Respondí.
Me giré. Sintiendo como los perros de ese hombre dieron un paso en el mismo instante en que lo hice.
- Eres tan parecido a tu padre. Aunque el solo tenga los ojos puestos en tu hermano, pero tanto tú, como tu hermano tienen la misma debilidad que tu padre cuando éramos jóvenes. ¿No lo crees?
Su sonrisa retumbó en el aire. El tono molestoso e irritante en su voz me provocó por instante, pero recordé el motivo por el que me encontraba en este lugar y sentí que mis pies flotaban y mi estómago se revolvió ante el miedo de que terminara lastimando a Noeul y su padre, solo por culpa mía.
- ¿Dónde está Noeul?
- ¿Quieres verlo?
Asentí.
- Muy bien.
Pateó el arma que dejé caer al piso. Dejó que uno de sus perros lo recogiera y me inmovilizaron los brazos, para guiarme hasta una habitación, donde lo primero que vi al entrar fue a Noeul en una de las sillas con una cinta en la boca y las manos atadas.
- Noeul!
- Sus ojos mi miraron y cuando pensé que buscaría decirme algo con ellos, solo evito volver a mirarme.
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NUNCA DEJES DE SONREIR
FanficDos mejores amigos amándose en secreto por más de cinco años, con el miedo constante de sacar a flote sus sentimientos y romper lo único que los une. Su única e inigualable amistad. Un joven hombre llegando a su país, después de siete años estudian...