CAPÍTULO (77)

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CAPÍTULO SETENTA Y SIETE—
EL BAILE DE NAVIDAD

— Me muero de hambre — decía Enzo caminando rápido hacía el Gran Comedor — Por favor que no hayan acabado los buitres de Crabbe y y Goyle con los Pixie Puffs — frota sus manos y mira al techo como señal de suplica

Cuando entramos al Gran Comedor Enzo no tardó en sentarse en la mesa de Slytherin y servirse un tazón de cereales Pixie Puffs. Theo e Irma se sentaron enfrente y Ada al lado de  Enzo. Cuando fui a tomar asiento al lado de la morena algo llamó mi atención.

— Bonito vestido, Ron — me acerqué a la mesa de Gryffindor — Te hace juego con los ojos. ¿Viene con sombrero? — me burlé buscando en la caja abierta sobre la mesa

— JA  JA — rió con los ojos entrecerrados — Ginny, debe de ser para ti —

— Yo no me pongo esa horterada — puso una mueca la pequeña de los Weasley

Hermione y yo no pudimos reprimir el reírnos cuando Ron se giró hacía nosotros con una expresión confusa.

— ¿Qué pasa con vosotros? —

— No es para Ginny — le dijo Hermione — Es para ti —

Todo el Gran Comedor exclamó una carcajada.

— Túnicas — sonreí

— ¿Túnicas? ¿Para qué? —

Me alcé de brazos y volví a la mesa de Slytherin, me senté entre Enzo y Ada y me comí un par de pasteles de calabaza.

Ese mañana la profesora McGonagall reunió a todos los alumnos de Gryffindor y Slytherin en el aula de Transformaciones. Debían comunicarnos algo y al parecer Snape no estaba muy por la labor. Cuando supimos de que se trataba no me sorprendió.

— El baile de Navidad — decía ésta — ha sido una tradición en el Torneo de los Tres Magos desde su concepción. En la noche de Pascua, nosotros y nuestros invitados nos reunimos en el Gran Comedor para una noche de inocente y educada frivolidad —

» Como representantes de la escuela anfitriona espero que vosotros deis los primeros pasos en todo. Y digo esto, literalmente, porque el baile de Navidad es, primero y ante todo, una danza —

Los quejidos de los alumnos y los murmullos emocionados de las alumnas presentes tapó la explicación de la profesora McGonagall.

— ¡Silencio! Las casas de Hogwarts se han ganado el respeto del mundo mágico durante casi diez siglos. No consentiré que, en el transcurso de una tarde, mancilléis ese nombre comportándoos como una banda de babeantes y bobos babuinos —

» La danza, consiste en dejar respirar al cuerpo. Dentro de cada mujer dormita un cisne en secreto y anhelando liberarse y alzar el vuelo...

— Algo está a punto de liberarse de Eloise Miden y no creo que sea un cisne — escuché a Malfoy reírse con sus amiguitos de la Gryffindor

— Cállate, Malfoy — puse los ojos en blanco intentando prestar atención a McGonagall

— Dentro de cada chico, un dominante león, serpiente, tejón o águila dispuesto a demostrar su valor. Señor Malfoy —

— ¿Sí? —

Sus burlas cesaron cuando la profesora se acercó a él.

— Venga conmigo, por favor — acompañó a la profesora hasta el centro de la habitación — Ponga su mano sobre mi cintura —

— ¿Dónde? —

Se me escapó una carcajada algo más fuerte de lo que habría deseado. El ver a Malfoy ponerse más pálido de lo que ya era y abrir los ojos como platos ante las palabras de la profesora McGongall me había superado.

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⏰ Última actualización: Nov 04 ⏰

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Una Potter serpiente                                            [DRACO MALFOY]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora